La Guardia Civil ha detenido este jueves a Feliciano Miguel Rosendo Silva, el fundador y líder de la secta Orden y Mandato de San Miguel Arcángel, tras registrar la vivienda que utiliza actualmente en la localidad madrileña de Collado Villalba. Fuentes de la investigación explican que ha sido arrestado en el marco de las investigaciones llevadas a cabo sobre las actividades de esta organización -que llegó a aglutinar unas 400 personas- después de que exmiembros de la misma denunciaran que se cometían abusos sexuales, físicos y psicológicos y que se enriquecían ilícitamente a su costa.

Detenido el líder y una monja 'migueliana'
Las actuaciones, abiertas contra la secta por asociación ilícita, han sido declaradas secretas por el juzgado número 1 de Tui (Pontevedra), según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Galicia. También ha sido detenida la monja 'migueliana' Marta Paz, según ha confirmado su padre, Carlos Paz, quien estuvo involucrado en esta presunta secta durante casi dos décadas hasta que salió de la misma junto a su esposa Concha Alonso, pero no pudieron convencer a su hija, de la que dice que le han "comido el coco".

Lanzados gracias a la JMJ de Madrid
Los 'miguelianos' no eran ningunos elementos ajenos a la jerarquía católica española. De hecho con sus canciones ante el papa Benedicto XVI se convirtieron nada más y nada menos que en los grandes referentes propagandísticos de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) de Madrid en 2011, es decir, un reclamo para captar jóvenes para la Iglesia católica. En varios vídeos de Youtube cientos de jóvenes atestiguan la emoción que sintieron al escuchar a los 'miguelianos'.

Así explicaba su labor una de las detenidas
El uso propagandístico de los 'miguelianos' no fue flor de un día, por ejemplo la diócesis de Toledo los convocaba para sus programas de radio como grandes referentes de evangelización. Así lo explicaba una de las integrantes de la orden ahora detenida, Marta Paz.



Apartados en los últimos meses
Cuando empezaron a filtrarse las denuncias en torno a la Orden de San Miguel el Episcopado tomó cartas en el asunto y los fue alejando. Rosendo fue apartado de la diócesis de Tui Vigo por "conducta moral inapropiada" alegando que durante años tuvo "engañados" tanto a sus correligionarios como a la propia Iglesia. Y la archidiócesis de Madrid emitió hace apenas dos semanas una nota para pedir a las parroquias que dejaran de contar con 'La Voz de Serviam', también vinculado a los 'miguelianos'.