El secretario de Estado de Comercio, Jaime Garcia-Legaz, y Francisco Nicolás

 

 


La oposición al tratado de libre comercio e inversiones (TTIP por sus siglas en inglés) que tramitan la Unión Europea y Estados Unidos está intensificando sus movilizaciones ante lo que denuncian como una nueva de tuerca a los derechos laborales que no tendrá sino efectos perniciosos entre los trabajadores de ambos lados del Atlántico como ha ocurrido ya con otros acuerdos similares. Así, la plataforma Stop TTIP, que reúne a más 320 grupos de la sociedad civil contrarios al acuerdo, entregó este martes a la Comisión Europea una petición firmada por más de un millón de personas en contra del futuro pacto.

"Felicitación sorpresa a Juncker"
El millón de firmas era necesario para calificar la petición como Iniciativa Ciudadana Europea (ICE) y se recogieron en menos de dos meses, un tiempo récord en el que jamás se ha logrado una propuesta de este tipo. En septiembre pasado, el Ejecutivo comunitario ya rechazó la solicitud para realizar una ICE oficial, por lo que a principios de octubre los grupos de oposición comenzaron a organizar otra. Más de 100 personas, incluidos varios eurodiputados de Los Verdes y de Izquierda Unitaria, esperaron frente al edificio de la Comisión Europea para entregar esta iniciativa, que calificaron de "felicitación sorpresa" al presidente de la Comisión Europea, Jean-Claude Junker, en referencia a que ha coincidido con su 60 cumpleaños.

Destrucción de empleo y pérdida de soberanía
El diputado de la Izquierda Plural en el Congreso, Joan Josep Nuet, y la portavoz de la delegación en la Eurocámara, Marina Albiol, dijeron hoy en una rueda de prensa que la formación dará la batalla para que no entre en vigor el TTIP, un acuerdo que creen no solo no creará empleo en la UE sino que lo destruirá. "El TTIP es una batalla política de primer nivel. Hoy por hoy somos entre 25 y 30 diputados los que estamos en contra pero en noviembre de 2015 seremos cientos", dijo Nuet. Tanto Albiol como Nuet participaran esta semana en la Eurocámara en unas jornadas sobre el TTIP que repetirán en distintas ciudades españolas y en el Congreso de los Diputados. "El TTIP es un aviso para navegantes: aunque ganéis en las urnas no podréis aplicar otras políticas", afirmó Albiol, que mostró su preocupación por como puede afectar a las normas laborales en Europa un acuerdo con EEUU.

 

 

 

García-Legaz con Margaret Thatcher en su imagen más conocida antes de que su difundieran sus fotos con 'el pequeño Nicolás' / Foto FAES García-Legaz con Margaret Thatcher en su imagen más conocida antes de que su difundieran sus fotos con 'el pequeño Nicolás' / Foto FAES

 

 


Un hombre clave del Gobierno en las negociaciones, totalmente quemado
Uno de los negociadores del Gobierno español en la gestación del TTIP está siendo el secretario de Estado de Comercio, Jaime García-Legaz, un activo defensor de las áreas de libro de comercio UE-EEUU. De hecho defendió esos acuerdos desde la FAES de la que fue secretario general y con la ayuda por supuesto de José María Aznar, que también defiende ese tipo de intereses al otro lado del Atlántico. El secretario de Estado ha vendido activamente las presuntas bondades del acuerdo asegurando que creará 144.000 empleos e incrementará la renta por habitante del país en hasta un 6%. ¿Pero dónde está este secretario de Estado cuándo se está denunciando la poca transparencia en la configuración del acuerdo? Pues está desmintiendo una y otra vez las acusaciones que le lanza 'el pequeño Nicolás' sobre intereses comunes en el pasado y promesas a empresarios y según un periodista de El Mundo incluso pidiéndo clemencia al joven. Esa es la credibilidad del Gobierno de Rajoy mientras en el seno de la UE se debaten asuntos claves para el futuro del país.