Este fin de semana, Informe Semanal dedicó el primero de sus reportajes a un tema que ha conmocionado a la opinión pública, el asesinato de la presidenta de la Diputación de León, Isabel Carrasco. Pero, siguiendo la línea de la prensa más conservadora, centró su diana en las redes sociales, a las que culpaba al tiempo que evitaba hablar de los problemas internos de la Diputación del PP. Es más, los autores del programa llegaron a olvidarse que las dos presuntas asesinas eran militantes del partido.

"Una madre y una hija confesas....", sin militancia política según Informe Semanal
A la hora de presentar a las protagonistas de ese trágico suceso, el programa que dirige Jenaro Castro despacha a las principales imputadas del crimen con la siguiente definición: “Una madre y una hija, asesina y cómplice confesas, mujer e hija de un policía de Astorga, ama de casa y extrabajadora de la Diputación, respectivamente”. Ninguna mención a la militancia en el PP de Triana Martínez, ni tampoco a su relación profesional y de partido con la víctima.
 

Captura de Informe Semanal, con las cuatro mujeres protagonistas..., a las que se presenta ocultando su pertenencia política

 

 


Ni siquiera cuando el programa reprodujo la fotografía en que aparecen juntas… La voz en off hablaba de que detrás del crimen podría estar “el rencor por haber perdido el empleo” y da voz a un periodista del Diario de León que se limita a recordar que la detenida no fue despedida, que era interina y que inició un contencioso con la Diputación de León. Nada más.

Regular las actividades de la red
El resto del reportaje hasta el final, firmado por José Miguel Casado, uno de los últimos fichajes de Jenaro Castro para el programa, no pasó de ser sino una sucesión de totales de miembros destacados del PP, un senador, el vicepresidente de la Diputación, la alcaldesa, el vicepresidente del Senado y expresidente de la Comunidad Autónoma..., declaraciones que sirven para elogiar la figura de la víctima. Opiniones que el periodista autor del 'informe' no tiene rubor en resumir en voz propia para decir que, “sustituirla no es sencillo”.

El reportaje acaba recogiendo el debate sobre los comentarios injuriosos en la red y la necesidad o no de regular este tipo de actividades. Se cuestiona si hay que poner límites y, con un rigor que hasta entonces no habíamos visto en el reportaje, el periodista recuerda que “dos concejales socialistas han sido forzadas a dimitir por sus comentarios en Twitter” relacionados con el asesinato de Isabel Carrasco.

La audiencia vuelve a suspender a Informe Semanal
En resumen, Informe Semanal ha vuelto a hacer lo que ya vimos en el reportaje de aniversario del 11-M, donde el espectador nunca supo quién puso las bombas en los trenes. Un desprecio por el rigor que está entre las principales causas de que el que fuera 'buque insignia' de los informativos de TVE haya visto cómo se derrumbaban sus audiencias hasta moverse en torno al 3-5% de share. Cifras que lo condenaron incluso a ser desplazado en su momento al horario marginal del llamado 'late night'.

En “Cuatro balas de rencor”, título del Informe, José Miguel Casado, ha hecho esta semana otro ejercicio de manipulación y de mal periodismo que está convirtiendo el que fuera buque insignia de la televisión pública en un altavoz de propaganda que, a la vista de las audiencias, no pasa desapercibido para los espectadores que, cada vez más, dan la espalda a un programa que “deforma”, más que informa. Como lo demuestra cada fin de semana la reacción en las redes.