Estudiantes pasan junto a Wert, ignorándole Algunos de los mejores expedientes del país negaron el saludo al ministro Wert al recibir su premio, el 5 de junio, como protesta por los recortes y su reforma educativa



Alrededor de 30.000 estudiantes en todo el país corren el riesgo de ser expulsados de la universidad por no poder hacer frente a las matrículas, que han aumentando de media unos 540 euros, en un momento de crisis en el que muchas familias están en serias dificultades y, además, se han reducido drásticamente el número de becas. El estudio ha sido realizado por el diario El País, a partir de los datos facilitados por todos los campus públicos, entre las mayores universidades.

En Madrid las matrículas cuestan un 38% más, en Cataluña, un 67%
En la Comunidad de Madrid, donde las matrículas han sido aumentadas en un 38% de media, las universidades han cifrado en 7.000 el número de los estudiantes que no han podido pagar las tasas. En Cataluña, donde el aumento ha sido de un 67%, suman al menos unos 3.000 casos, es el triple de hace tres años.

5.700 estudiantes en Andalucía
Las universidades en Andalucía han contabilizado al menos 5.700 estudiantes que están al borde de tener que dejar sus estudios. Mientras, la Universidad Politécnica de Valencia confirma 656; la de Oviedo, un millar; la del País Vasco, 241; Castilla-La Mancha, 377; y el campus de A Coruña, 160. El riesgo de que tengan que abandonar sus estudios para estos alumnos es máximo, ya que el impago de las matrículas provoca la expulsión del alumno.

El recorte en becas
El recorte en becas impuesto por el Gobierno es una de las causas más importantes en la situación descrita. En la Universidad de Sevilla un 15% más de los alumnos, 13.000, se han quedado sin beca. En Cataluña, ha sido un 20%, y en Salamanca han pasado de un 38% al 45% los estudiantes que no recibirán la ayuda, unos 5.853 jóvenes.

El caso de Gloria, que depende de su abuelo con una pensión de 600 euros
Los recortes están siendo brutales para muchos estudiantes que tienen una situación familiar complicada. Gloria Blanco es una de estas jóvenes que pone rostro a estas estadísticas. Vive en Santa Coloma de Gramenet con su abuelo y sus dos hermanas de 22 y 25 años. Resisten gracias a la pensión de su abuelo, 600 euros. Sus hermanas hacen cursos de formación y están sin trabajo desde hace un año y medio. Según cuenta Gloria, acudió a la universidad para pedir ayuda, porque “no quería dejar la carrera, pero no me ofrecieron ninguna solución”.

Los estudiantes crean una plataforma para luchar contra las expulsiones
Tras la impotencia ante el escenario que tienen delante, los jóvenes han creado la Plataforma de Afectados por las Tasas (PAT), que ya cuenta con miembros en Madrid, Barcelona, Sevilla y Bilbao. Piden que se “activen campus virtuales a los alumnos expulsados” y pretenden hacer presión para que “no se expulse a ningún alumno por motivos económicos”.