El Rey ha viajado ayer a Cataluña para entregar el IV Premio Internacional Conde de Barcelona al cardenal y secretario de Estado del Papa Benedicto XVI, Tarcisio Bertone. Al acto han acudido, entre otros, Artur Mas, a quien el Rey ha saludado con un "buenas tardes, president" como ha hecho con el resto de autoridades presentes en la entrega del premio, como el expresidente de la Generalitat Jordi Pujol, según han confirmado a Europa Press fuentes de Zarzuela.

Ni una palabra, a pesar de sentarse juntos
Durante el acto, el Rey y Mas han estado sentados uno al lado del otro, pero no han cruzado palabras. Tampoco manutuvieron ninguna conversación durante la copa de cava que se sirvió tras la entrega del premio.

La gravedad de la actual etapa
En su discurso, que empezó en catalán, el Rey dijo confiar en la capacidad de catalanes, españoles y europeos para superar "la gravedad de esta etapa histórica" con esfuerzo, el buen sentido de todos, así como el impulso de la sociedad civil en todos los campos.

El Rey llama al buen sentido de todos
El Monarca apeló al “esfuerzo y el buen sentido de todos", añadiendo que "sería ceguera no ver la gravedad de esta etapa histórica, pero sería irresponsable igualmente caer en un abatimiento infecundo sin advertir y ser conscientes de que el genio y la voluntad de los hombres y las mujeres de Cataluña, de España entera y de Europa serán capaces de superar estas circunstancias".

Amplia representación de empresarios catalanes
Al acto asistieron numerosos empresarios, entre los que se encontraban el presidente de CaixaBank, Isidre Fainé; su antecesor en el cargo, Ricard Fornesa; el presidente de Gas Natural, Salvador Gabarró; el de Abertis, Salvador Alemany; el consejero delegado de esta concesionaria, Francisco Reynes; el presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Miquel Valls; el presidente de Mediaplanning, Leopoldo Rodés; el del grupo Planeta, José Manuel Lara; y el presidente del grupo Godó, Javier Godó.