Soy un convencido de que el enorme error de las gentes progresistas en España, ha sido no aceptar que sólo había hueco para un medio: El País; y una TV, la que apoyara ese grupo empresarial.

Al señor Roures le animaron a crear toda una panoplia de medios de comunicación precisamente para competir con el grupo PRISA.

El señor Roures puede ser que sepa mucho de medios de comunicación, en general, pero no tiene ni idea del mercado de comunicación progresista.

Alguien le animó a invertir tanto en prensa como en TV asegurándole que había un grupo de compradores muy progresistas desasistidos en los kioskos y en las pantallas. El que aconsejó fue un torpe (políticamente) y el que aceptó el consejo un inútil (empresarialmente).

Las gentes progresistas son, en general, malos empresarios. Y si sale un empresario que juega progreso en esto de los medios de comunicación, habría que haberle apoyado con todas las fuerzas.

Digámoslo claro: el único proyecto bien construido en este terreno era y es el grupo PRISA: ahora fundamentalmente, El País y la cadena de radio SER.

Público se nos muere por intentar lo que era imposible desde el principio: construir un grupo de medios de comunicación a la izquierda del grupo PRISA.

España acepta de muy buen grado a El País pero le resulta difícil de entender Público. ¿Pero, no existe el ABC, La Razón y tantos dogmáticos de la derecha? Naturalmente que sí: existen y existirán. En España -y en el mundo occidental de hoy- se aceptan dogmáticos exagerados de derechas, pero sólo se toleran templados críticos de izquierdas. El País lo leen todos los directivos de una empresa seria y todos los ciudadanos que quieren información solvente, Público sólo lo leen los que quieren demostrar que están en contra de algo. La contestación no vende millares de ejemplares. Otra cosa es que veas un día en TV miles de indignados por algo.

Con El País no se pretende confirmar ideas, con ABC y La Razón, sí. Por eso El País es tan importante para un progresista.

No sé de quién fue la idea de animar al señor Roures para que invirtiera en una alternativa a El País. Lástima que no nos consultase a algunos. El señor Roures debió meter todos sus recursos en un Grupo PRISA que tenía dificultades serias y pedir su porcentaje en el proyecto. Alguien le confundió pensando que PRISA podría desaparecer y que, como en Macbeth, le dijeron: “Tú serás rey”. Todos los actores de esa obra que se nos termina son unos torpes que han dañado a los progresistas españoles a niveles impensables.

Me cuesta imaginar una España con el PP gobernando con mayoría absoluta y un PSOE todavía sin ideas claras y, a la vez, sin una televisión progresista, ni un periódico progresista, ni una radio progresista. Muy complicado.

Pero no todo es desesperadamente triste: nos quedan El País y la Cadena SER. Y los periódicos digitales (como ELPLURAL.COM) que van a tener que jugar también algo en este debate casi solitario.

Luis Solana es militante socialista y promotor de Nuevas Tecnologías
www.luissolana.com