El juez Eloy Velasco emitió este miércoles un auto al que ha tenido acceso ELPLURAL.COM, por el que declara el “carácter complejo” de la investigación de la trama Púnica, lo que permitirá que se sigan realizando pesquisas durante 18 meses desde el momento en que se levante el secreto de sumario.

Esto tiene una doble lectura porque, por una parte, el magistrado pone en evidencia la reforma legal del Gobierno de Mariano Rajoy en la Ley de Enjuiciamiento Criminal (LECRIM) que obstaculiza la investigación de los casos de corrupción y, por otro lado, el juez califica a la trama Púnica, entre otras cosas, como “una organización criminal”.

El auto del magistrado hace una mención a la interminable lista de implicados y de delitos que protagonizan la trama Púnica. El documento responde a la petición del Ministerio Fiscal del 15 de marzo de que se realice una “declaración de complejidad” de la Púnica.

Según la reforma de la LECRIM realizada por el Gobierno y aprobada por el PP el 6 de diciembre de 2015, las investigaciones judiciales sólo podrán durar medio año. Así lo explica el artículo 324.1, criticado por todas las organizaciones judiciales: “Las diligencias de instrucción se practicarán durante el plazo máximo de seis meses desde la fecha del auto de incoación del sumario o de las diligencias previas”.

Sin embargo, si el Ministerio Fiscal pide que se declare “la complejidad” de la causa, el juez puede alargar las pesquisas hasta los 18 meses, siempre y cuando la investigación cumpla alguno de los siete supuestos que se señalan en el artículo 324.2 y que son los siguientes:

a)      recaiga sobre grupos u organizaciones criminales;

b)      tenga por objeto numerosos hechos punibles;

c)      involucre a gran cantidad de investigados o víctimas;

d)      exija la realización de pericias o de colaboraciones recabadas por el órgano judicial que impliquen el examen de abundante documentación o complicados análisis;

e)      implique la realización de actuaciones en el extranjero;

f)       precise de la revisión de la gestión de personas jurídico-privadas o públicas; o

g)      se trate de un delito de terrorismo.

Y la Púnica, según señala Velasco en el propio auto, cumple seis de los siete supuestos: todos menos el de terrorismo. Esto quiere decir que no sólo hay un gran número de presuntos "delitos", de "investigados" o de "documentos", o incluso la necesidad de investigar en el extranjero. Es que también considera que se está hablando de una "organización criminal".

Por estas razones, el magistrado accede a declarar la complejidad de la trama, lo que le da un plazo de 18 meses para investigar. ¿Y cuándo arranca la cuenta atrás? Pues Velasco señala que la fecha del auto de incoación es anterior a la aprobación de la reforma de la LECRIM, por lo que habría que computar desde ese 6 de diciembre en que se publicó la nueva norma. Sin embargo, añade que, como aún no se ha levantado todo el secreto de sumario, será a partir de que se produzca ese hecho cuando empezará a contar los 18 meses. Por lo que hay Púnica para rato.