Alberto Rodríguez no se ha hecho famoso en unas horas por sus estudios, su profesión, ni siquiera por haber participado en algún reality cutre y 'salchichero'. Alberto Rodríguez es noticia por su peinado. Para ser justos lo es porque un sector determinado de medios de comunicación, el conservador, y un grupo de políticos concretos, algunos del PP, se han dedicado a hablar de sus rastas, de los piojos y de la limpieza, cuando apenas son capaces de limpiar los pasillos de su casa (sin ir más lejos, arriba del todo tenían a un más que sospechoso).
Pero resulta que este diputado canario por Podemos, además de sus otras cosas más allá de su peinado, es también solidario y así lo ha recordado en alguien en Facebook...
Y así es. Tal y como recuerda Ernesto Llebry, el diputado de Podemos, sin chaqueta o corbata aunque sí con sus rastas, fue el único que se digno a ir y ayudar en la recogida de juguetes y alimentos para los más necesitados.
El propio Ernesto pide a la gente que ser "un poco más humildes" porque, al fin y al cabo, "el hábito no hace al monje". Por cierto, para los mal pensados que podrían vincular el gesto de Alberto Rodríguez con las elecciones, cuando acudió a esta asociación "con sus rastas y su chándal de andar por casa", ya había logrado su acta de diputado.
No es preciso añadir más comentarios.