[[{"type":"media","view_mode":"media_large","fid":"25251","attributes":{"class":"media-image size-full wp-image-207251","typeof":"foaf:Image","style":"","width":"640","height":"320","alt":"El ministro de Econom\u00eda, Luis de Guindos (i) y el titular de Hacienda, Crist\u00f3bal Montoro, durante el pleno del Congreso que debate las enmiendas a la totalidad presentadas al proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado para 2014. EFE"}}]] El ministro de Economía, Luis de Guindos y el titular de Hacienda, Cristóbal Montoro, en los pasillos del Congreso / EFE-Archivo



Sareb, el "banco malo" creado con dinero público para absorber las pérdidas de los bancos en el 'ladrillo', presenta unos números nefastos. El pasado martes presentó las cuentas de 2014 con unas pérdidas netas de 585 millones de euros. La sangría llega por todos lados, por ejemplo se perdieron 114 millones de euros en gastos de conservación y mantenimiento de inmuebles, de los cuales 49 correspondieron a gastos de comunidades de propietarios y 43 al pago del impuesto de bienes inmuebles (IBI). Además, la sociedad gastó otros 22 millones al mantenimiento de sus inmuebles hasta llegar a los mencionados 114 millones, el 23% de los gastos totales.

Pérdidas esperadas y otras por la 'habilidad' de los gestores
En realidad, al crearse como una red para que los bancos soltaran sus activos tóxicos, SAREB nació, se reconozca o no, para perder dinero en el corto y medio plazo. Otra cosa es que esté perdiendo mucho más dinero público del previsto por la impericia de sus gestores. Así, El Confidencial ha entrado en la letra pequeña de las cuentas para poner el foco en el siguiente dato: el deterioro de 2.032 millones reconocidos en el epígrafe ‘Ajustes por Cambios de Valor’.

Una 'cláusula suelo' gigante que ha beneficiado a los bancos
Como recoge la memoria anual, esas pérdidas proceden de la contratación con varias entidades financieras de un derivado de tipos de interés –intercambio de tipo variable por otro fijo–para "reducir el riesgo para la sociedad de una posible subida" de los mismos. El importe cubierto fue de 42.221 millones de euros y la horquilla de variación se fijó entre el 0,491% y el 3,145% anual. Pero sucedió lo contrario, bajaron los tipos y la cláusula actuó, resume El País, como una "cláusula suelo gigante". La cobertura se contrató con Banco Santander, Société Générale, Cecabank, Crédit Agricole y Barclays y a 31 de diciembre de 2014 había provocado unas pérdidas de 2.710 millones de euros, y además seguirá lastrando los próximos ejercicios.

¿Un contexto de bajada de tipos que desconocía De Guindos?
El BCE está llevando desde 2012, y sobre todo desde que España 'tragó' con el rescate bancario y la creación del banco malo, una política de reducción de los tipos de interés con los que intenta dinamizar la estancada economía europea y facilitar la financiación de las economías que hacen los deberes exigidos por la Comisión Europea. ¿No tenían ni idea de eso los 'gestores' que puso el PP al frente de SAREB, personas de la confianza del ministro de Economía? Luis de Guindos eligió para el puesto a Belén Romana, quien dejó el cargo al principio de este año. Eso sí, Romana se marchó tras dejar un buen pufo con su 'cláusula suelo' y habiéndose llevado un sueldazo de medio millón de euros anuales por su supuesta habilidad directiva, una cantidad que a De Guindos le parecía acorde a "un"esfuerzo de moderación y austeridad".