[[{"type":"media","view_mode":"media_large","fid":"27949","attributes":{"class":"media-image size-full wp-image-296429","typeof":"foaf:Image","style":"","width":"640","height":"405","alt":"El secretario general del PSOE, Pedro S\u00e1nchez (i), junto al expresidente del Gobierno Jos\u00e9 Luis Rodr\u00edguez Zapatero (d), durante la celebraci\u00f3n del 25 aniversario del diario El Mundo en la que se entregan los XIII Premios Internacionales de Periodismo que concede este peri\u00f3dico. EFE\/Archivo"}}]] El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez (i), junto al expresidente del Gobierno José Luis Rodríguez Zapatero (d), durante la celebración del 25 aniversario del diario El Mundo en la que se entregan los XIII Premios Internacionales de Periodismo que concede este periódico. EFE/Archivo



Los ánimos están caldeados en el PSOE. Más de lo habitual, para ser concretos, a raíz de la confesión de José Luis Rodríguez Zapatero sobre su reunión con los líderes de Podemos, justo cuando Pedro Sánchez está más custodiado y es el blanco continuo de los ataques de Pablo Iglesias. La escenificación de cara a la galería se ha vivido esta tarde, durante la presentación del último libro del exministro Jordi Sevilla. Allí, el que fuera líder del PSOE y el actual secretario general han tenido que posar juntos, aunque separados por Sevilla en un momento de cierta tensión en el que no se dieron la mano.

Pero la procesión va por dentro y el panorama interno socialista no pasa por sus mejores momentos. La actual dirección del PSOE está muy molesta con las zancadillas que están recibiendo de los antiguos pesos pesados y que van mucho más allá de la reunión de Zapatero y José Bono con Iglesias e Iñigo Errejón.

La salvación andaluza
Según la actual dirección, Zapatero lleva semanas haciendo movimientos y celebrando reuniones con ex dirigentes del PSOE para criticar la gestión de Pedro Sánchez y señalar a Susana Díaz como la única salvación para los socialistas. Y, además, critican que Zapatero presuma de mantener su lealtad con Sánchez cuando nunca le comunicó su relación con Pablo Iglesias.

La venganza de José Blanco
Pero el cabreo no se circunscribe a Zapatero, según Público, y también apuntan a otros ex dirigentes, como José Blanco, al que la actual dirección acusa de estar maniobrando desde hace tiempo contra Sánchez, a pesar de que fue uno de sus principales apoyos frente a Eduardo Madina, al que consideraba demasiado de izquierdas. De hecho, el entorno de Sánchez cree que el motivo de Blanco está en que el nuevo PSOE le obligara a devolver los 140.000 euros que el partido desembolsó para pagar su defensa en el caso Campeón.

La traición de Carme Chacón
Carme Chacón también tiene muy molesta a la dirección del PSOE, aunque está en el Comité Ejecutivo por decisión de Sánchez, pero la exministra de Defensa presume de que ella siempre ha sido de Susana Díaz. Pero hay algo más, porque al entorno de Sánchez no se le olvida que Chacón es amiga del rector de la Universidad de Washington, que se burló en Twitter de Pedro Sánchez por haberse perdido y llegado tarde a una charla en la facultad, lo que le ha valido la mofa pública y le ha dado una ingente cantidad de munición a Pablo Iglesias, con la que le bombardeó el pasado fin de semana.