La jueza argentina María Servini, que investiga la llamada querella argentina contra los crímenes del franquismo, a su llegada a la sede del Parlamento Vasco en Vitoria, donde se ha reunido con la presidenta de la Cámara, Bakartxo Tejería. EFE

 

 


Victimas nonagenarias, fosas comunes en cementerios, recepciones oficiales, archivos militares  forman parte del viaje de la jueza argentina María Servini de Cubría que desde el pasado domingo visita Euskadi, Andalucía y Madrid tomando declaraciones a testigos demasiado mayores o enfermos para desplazarse hasta su juzgado de Buenos Aires. Hasta el día 30 la jueza va guardando en su equipaje oficial mucho dolor pero, sobre todo, mucha esperanza en que la verdad y la justicia se abran camino.

Tanto tiempo esperando y Felix Padín, de 97 años, justo cuando la jueza María Servini de Cubría llegó al País Vasco para tomarle testimonio, sufrió una fuerte subida de tensión. El antiguo miliciano denunciante en la querella por los crímenes del franquismo que instruye la magistrada en Buenos Aires,  quería contarle el drama que sufrieron los miles de internos en el campo de concentración de Miranda de Ebro.

Félix declaró en el hospital
Con gran disgusto y desilusión, tuvo que ser hospitalizado. Pero María Servini acudió al centro sanitario y le tomó testimonio. Félix demostró estar en perfectas condiciones mentales y muy satisfechas por haber logrado narrar su historia.

 

 

 

La jueza argentina María Servini, que instruye la causa 4591/10 por crímenes del franquismo, durante la rueda de prensa en el Ayuntamiento de San Sebastián, acompañada por el alcalde de la ciudad, Juan Carlos Izagirre (i) y el secretario judicial Alfredo Mangano. EFE

 

 


La cárcel de los curas
Así empezó su periplo por España la jueza el pasado lunes día en que saludó a la presidenta del Parlamento Vasco. El martes tomó declaración a los hermanos Elisa y Julen Kalzada acerca del fusilamiento de su padre y de la detención, juicio y encarcelamiento de Julen en la cárcel concordataria de Zamora, la cárcel de los curas.

Recepciones en Donostia
Después, fue recibida por la corporación municipal en el Ayuntamiento. Visitó también  la Casa de Juntas y el Árbol de Gernika . Ese mismo día, el  Alcalde de San Sebastián, ciudad masacrada con la entrada de las tropas franquistas, le ofreció su colaboración en la denominada “ causa 4591/10 por los delitos de genocidio y/o crímenes de lesa humanidad cometidos en España por la dictadura franquista entre el 17 de julio de 1936 y el 15 de junio de 1977”

Juzgados que colaboran y que no
Explican en CEAQUA, la coordinadora que aglutina a denunciantes y víctimas, que en la rueda de prensa posterior celebrada en la sala de prensa del consistorio donostiarra prestada por el alcalde, la jueza resaltó ante los medios, “la nula colaboración del Juzgado de Miranda de Ebro en contraposición con la buena acogida por parte del Juzgado de Gernika”. Vino a decir también que el tiempo se le hacía corto para todo lo que era preciso realizar.

Visitas a denunciantes mayores
Hoy, María Servini sigue su periplo por Andalucía, llegando a Sevilla donde el  jueves visitará en su domicilio a tres víctimas. En Marchena a Antonia, la hija de Antonio Parra Ortega que quiere recuperar los restos de su padre que piensa están en la fosa del cementerio de la localidad.

El hijo del fusilado
En Sevilla tomará testimonio después al hijo de Manuel Marín Rodríguez que hoy tiene 90 años pero contaba solo 14 cuando asesinaron a su padre en septiembre de 1936 en la tapia del cementerio de la ciudad, donde cree se encuentra su cuerpo, en una fosa común. Manuel dejó viuda y seis hijos. La esposa estaba embarazada del séptimo.

Los asesinatos de Carmona
Más tarde, en Carmona, María Servini escuchará al nieto de Francisco de Paula Nodal Ávila y sobrino de Antonio Nodal Pulido por quienes ha presentado denuncia. Tiene 87 años y apenas 10 cuando los asesinaron allí mismo en Carmona, por aplicación de bando de guerra. Sus cuerpos se encuentran en distintas fosas comunes, en Carmona y el Viso del Alcor, Sevilla.

Recepción de la Junta andaluza
Ya el viernes, la jueza será recibida por el vicepresidente de la Junta de Andalucía, Diego Valderas y el director general de la Dirección General de Memoria Democrática de la institución, Luis Naranjo. Aprovechará, como era su intención, para visitar el Archivo del Tribunal Militar Territorial Segundo donde se encuentran los expedientes de la represión. Se prevé además un recibimiento oficial del presidente del Parlamento Andaluz, Manuel Gracia.

Fosa común en El Madroño
Se prevé una visita el sábado al cementerio de la localidad de "El Madroño", donde la Asociación Andaluza Memoria Histórica y Justicia ha abierto hace poco una fosa común en la que se localizan  29 cuerpos de personas asesinadas.

El cementerio de Málaga
El domingo  María Servini conocerá otro cementerio, esta vez en Málaga, el de San Rafael escenario de dramáticos acontecimientos en el mismo periodo. Los relatará una catedrática de Historia de la Universidad de Málaga. También estarán presentes, acompañando, la Asociación por la Recuperación de la Memoria Histórica de Málaga y la Asociación por la Lucha de Madres de Bebés Robados de Andalucía (ALUMBRA).

Con Faustina, detenida de niña
En Madrid, del lunes al miércoles, se presentaran ante María Servini los testimonios de una víctima de 93 años que denuncia por su abuelo paterno, su padre y sus dos hermanos. Y escuchará a Faustina, una anciana de 90 años  detenida junto a su padre y su madre  cuando tenía  solo 15 años. Mataron al padre, la madre quedó en prisión y la niña que era entonces quedó en la calle sola y desamparada. Así es el viaje de la jueza argentina.