Ya lo dijo ELPLURAL.COM el pasado mes de mayo, atendiendo a las predicciones realizadas por The Wall Street Journal, The Guardian, Financial Times y FEDEA, que ya vaticinaban que la intervención financiera de Castilla-La Mancha era y es el único camino para cumplir con el déficit, situado a 31 de diciembre de 2011 en el 7,5%, el mayor de todas las comunidades autónomas y que su presidenta, María Dolores Cospedal, pretende reducir este año hasta seis puntos sin aplicar más recortes. Intenciones que ponen en duda todos, incluido el Gobierno de la nación, menos los fervientes seguidores de la secretaria general del PP, que a decir verdad están exclusivamente localizados en territorio manchego.

Fondo de Liquidez Autonómico
Con estos datos y con una deuda desproporcionada de 10.800 millones de euros, nos es de extrañar que el Gobierno de Cospedal esté decidido a pedir la ayuda del Fondo de Liquidez Autonómico (FLA) porque a día de hoy necesita ingentes cantidades de dinero para hacer frente a los vencimientos que se antojan imposibles de cumplir por las duras condiciones que imponen los mercados (la prima de riesgo se situó el viernes por encima de los 600 puntos básicos y las emisiones castellano-manchegas ya se consideran bonos-basura).

¿Cuándo vendrán los hombres de negro?
Así las cosas, todos esperan en Castilla-La Mancha, una comunidad con una deuda que representa el 18% de su PIB, solo superada por Cataluña y Valencia, la llegada de los “hombres de negro” del Ministerio de Hacienda, que no dudará en imponer duros ajustes a cambio de que la Comunidad pueda acceder a los citados fondos que le permitan ser rescatada por el Gobierno central. Eso sí, el Ejecutivo de Cospedal todavía no ha dicho estaba boca es mía, y sí ha expresado su desasosiego por las cuentas, como bien se encargó de subrayar hace unos días su consejero de Economía, Arturo Romaní, quien no dudó en expresar su “preocupación por la tesorería de la comunidad”, dijo.

El PSOE pide explicaciones
Ante esta situación, el coordinador de los diputados castellano-manchegos en el Congreso, Alejandro Alonso, exige a la presidenta María Dolores Cospedal que aclare “hoy mismo (por el sábado) si va a pedir el rescate para Castilla-La Mancha y que diga qué precio está dispuesta a pagar” por la intervención.

Los ciudadanos no pueden más
El parlamentario toledano tiene claro que la sociedad castellano-manchega “no está ya para soportar más recortes de los que ya ha soportado en el año de Gobierno del PP en nuestra región”, añadía en rueda de prensa, “Cospedal nos debe decir cuánto antes no solo si es cierto o no que se esté planteando solicitar un rescate para nuestra región, sino cuáles serían las condiciones de ese rescate y qué nuevos ajustes nos impondría el señor Montoro, que se sumarían a los recortes que ya ha hecho Cospedal en el año que lleva de Gobierno”.

El palo y la zanahoria
No es de extrañar, entonces, la preocupación de los socialistas a tenor de las declaraciones del ministro Montoro, que reconoció aplicar con las comunidades el conocido truco del palo y la zanahoria. De ahí la rebelión de hasta cinco comunidades en la pasada reunión del Consejo de Política Fiscal y Financiera, cansadas ya de tantas amenazas y de presiones del Gobierno central para que aprieten, más todavía, el cinturón de las cuentas regionales, cuando por las mismas el Estado español pide mayor flexibilidad a Europa.