Una foto de 2006 ha circulado por los medios alemanes y ha provocado un alud de críticas, como puede observarse viendo ELPLURAL.COM. En la foto aparece la princesa Corinna zu Sayn-Wittgenstein, novia de Su Majestad y, por otra parte, empresaria de cacerías, como la de los mata elefantes de Botswana. ¿O acaso empresaria también de la polémica cacería -en la que estuvo el Rey- de osos en Rusia, precisamente ese año 2006 y con un oso emborrachado para que no sufriera en su muerte?

Un acto oficial
Aunque en la Casa Real, según su costumbre, hayan tratado de minimizar el asunto de la princesa alemana, lo cierto es que el acto era oficial y que el Rey y ella iban prácticamente juntos, tras bajar del avión, por cierto, perteneciente a las Fuerzas Armadas de España.

Rajoy, el metepatas
Rajoy ha vuelto a exhibir, desde luego, su acendrada condición de presidente metepatas.  Ocurre que, por desgracia para este país, en el caso que nos ocupa –y que no es  solamente, ni mucho menos,  una narración para la prensa del corazón-,  ha habido importantes sectores políticos y empresariales que han demostrado una preocupante irresponsabilidad.

Ni puntual ni anecdótico
No  han querido tomarse en serio que lo que está aconteciendo aquí no es un suceso puntual y más o menos anecdótico. Los graves indicios que están sobre la mesa no se resuelven aplaudiendo al Rey con fervor impostado –tanto populares como socialistas- en el Congreso de los Diputados, a raíz del affaire Urdangarin.

Una frase que merece respeto
Ni tampoco se resuelven otros asuntos poco tolerables de quien es el Jefe del Estado por mucho que saliera de pronto ante la opinión pública diciendo una frase que merece sin duda respeto, pero que no cambia, salvo prodigios, la hoja de ruta del máximo representante del Reino de España.  La frase fue bien intencionada, pero los ciudadanos prefieren el refrán de “obras son amores y no buenas razones”.

A distancias de los forofos
Impulsados por un razonable diagnóstico de Tomás Gómez, por una intervención muy sensata de Patxi López y por los razonamientos de Jaume Collboni, portavoz del PSC, entre otros dirigentes, los socialistas empezaron a marcar distancias de los forofos de la Monarquía.  Que algunos tomen nota.

Estupidez o cinismo
Mirar hacia otro lado, cuando la situación esta cogida con alfileres, es  estupidez o  cinismo. La Monarquía se encuentra, ahora mismo, en su momento más delicado desde la transición. Señalamos hace unos días que todo apunta a fin de ciclo o a fin de reinado. Y nos reafirmamos  en que el traspaso de la Corona de Juan Carlos I al Príncipe Felipe es urgente, le guste o no le guste a Su Majestad.

Un régimen honorable
Como nos reafirmamos en que, si no se arregla  todo esto pronto y bien, la Monarquía deberá dar paso de forma ineludible a la República. Subrayamos de nuevo que la República es un régimen honorable y ampliamente mayoritario en Europa desde hace muchos años.

Enric Sopena es director de ELPLURAL.COM