Los mecenas Aznar y Aguirre
La ayuda de dinero público al proyecto del Diccionario, de casi 6 millones de euros, fue aprobada durante el mandato de José María Aznar en 1999, con Esperanza Aguirre en el ministerio de Educación y Cultura.
Wert había adelantado el apoyo del Gobierno
Aunque la decisión del Gobierno de liberar los fondos para el Diccionario Biográfico cae como un jarro de agua en la comunidad académica, científica y social –ha recibido un gran rechazo por sus polémicas entradas sobre Franco y otros protagonistas de la Guerra Civil-, el apoyo del Ejecutivo de Rajoy estaba cantado. Hace dos meses, el ministro de Educación, José Ignacio Wert, adelantó que no haría nada para reclamar a la Academia de la Historia una revisión de la obra, al plantear que “no hay nada más contradictorio que un intervencionismo estatal, si me permiten expresarlo con mayor crudeza, una censura estatal al trabajo de las academias”.
El exministro Gabilondo cuestionó su rigor
Su postura difiere de la mantenida por su antecesor en el cargo, el exministro socialista Ángel Gabilondo, que, aunque expresó su respeto por el trabajo de los académicos y su libertad de expresión, puntualizó que “parece indudable que existen ciertas entradas en el diccionario que se han apartado del necesario rigor y objetividad, y de la ecuanimidad que debería presidir la elaboración de esta obra”.
No habrá cambios
El presidente de la nueva comisión encargada de la corrección de la obra, tras la renuncia de Miguel Artola, Faustino Menéndez Pidal, reconoció que la revisión de la Real Academia de Historia no iba a cambiar grandes cosas, según El País.
Las entradas dedicadas a Franco, Carrillo o Negrín
Las entradas del Diccionario que más polémica han provocado son las dedicadas a Francisco Franco, escrita por Luis Suárez, miembro del Opus Dei, vinculado a la Fundación Francisco Franco, presidente de la Hermandad del Valle de los Caídos y catedrático de San Pablo CEU. El historiador afirmó que el Generalísimo “montó un régimen autoritario, pero no totalitario”.
El Diccionario no trata de igual manera a los líderes del otro bando. Sobre Santiago Carrillo dice que llevó a cabo “una política de terror revolucionario que compartieron todas las organizaciones del Frente Popular” y sobre Juan Negrín, que fue presidente de un “Gobierno prácticamente dictatorial”.
