Pues bien, ya lo ha conseguido. Muerto el perro, se acabó la rabia. Para el PP era urgente terminar con él cuanto antes. El despliegue para erradicarlo por once años de su carrera judicial ha sido eficazmente llevado a cabo.

El mundo al revés
Han ganado los gansters güartelianos.  Ha sido abatido Elliot Ness/Garzón. En este caso, además, el mundo funciona al revés. El juez que con valentía sí cree en la Justicia ha sido duramente castigado. Los acusados -expertos en eludir a la Justicia por sus presuntos delitos de corrupción- han triunfado.

Camps y sus misteriosos trajes
Recuérdese cómo el nuevo fiscal general del Estado, Eduardo Torres-Dulce -que ayer elogió sin embargo al fiscal del Supremo Luis Navajas por su defensa en favor de Garzón-, lo primero que ha hecho es impedir que los fiscales  se personen en el recurso contra el veredicto del Jurado Popular en el caso de Francisco Camps y sus misteriosos trajes.  La Justicia conservadora tiene ahora más protección gracias al Gobierno que preside Mariano Rajoy.

El sacrificio injusto
Había que cargarse a Garzón porque los populares necesitaban como fuere limpiar formalmente la mierda de la trama gürtel. Ya la han limpiado. Eso sí con la ayuda de determinados magistrados de la Sala de lo Penal y con el sacrificio injusto del juez español más prestigioso.

Una república bananera
Los tres juicios del Tribunal Supremo contra el juez Garzón han proyectado en los países democráticos una oleada de indignación. La España del PP se parece, merced a tales juicios, a una república bananera. O, digámoslo sin tapujos, se parece en cierto modo también a aquella sórdida España del golpe militar, la guerra civil y los cuarenta años de la paz de los cementerios.

El ominoso pasado
La imagen de la España democrática está siendo, cada día que pasa, cuestionada por la prensa extranjera más acreditada, como Le Monde y New York Times, entre otros. En menos de dos meses, Rajoy y sus ministros  intentan que regresemos por el túnel del tiempo hasta llegar al ominoso pasado.

Patadón y tentetieso
La euforia de destacados y destacadas dirigentes del PP, tras saberse la vesania judicial montada  contra Garzón, confirma que a este Gobierno tan presuntamente patriota le importa una higa la España  de las libertades. A Rajoy le gusta más la del patadón y tente tieso, con jueces mayoritarios salidos de la caverna. Y es que, como queda dicho, la Justicia, de hecho, no es igual para todos.

Enric Sopena es director de ELPLURAL.COM