Miguel Martínez es profesor de Literatura Española en la Universidad de Chicago y autor de Front Lines. Soldiers’ Writing in the Early Modern Hispanic World, publicado por la Universidad de Pennsylvania en el año 2016. Sin embargo, ha dejado por un momento sus labores sobre las Letras en el Siglo de Oro para centrarse en la última obra lírica de la idiosincrasia patria: el himno de Marta Sánchez. Lo ha hecho en Tiwtter con un análisis de texto cómico que ha dejado por los suelos la capacidad lírica de la cantante.
Ya antes había criticado la “vergüenza de tener que deglutir estos versos cada vez que suena el himno” y había pedido por “urgencia patriótica” que se estudie más “poesía en las escuelas”.
"Rojo, amarillo, colores que brillan en mi corazón y no pido perdón"
— Miguel Martínez (@fusonegro) 19 de febrero de 2018
"pero no olvides que sin ti no sé vivir"
La vergüenza de tener que deglutir estos versos cada vez que suena el himno. Poesía en las escuelas ya, por favor. Urgencia patriótica
Sin embargo, lo que más éxito ha tenido ha sido su “comentario de texto” sobre la letra que ha compuesto Marta Sánchez y que tantos titulares ha provocado esta semana. Su crítica, además, incluye una mención a Albert Rivera, uno de los más acérrimos aficionados al himno, y a Esteban González Pons, que pidió que la exintegrante de Olé, Olé recitase su ocurrencia en la final de la Copa del Rey.
Son apenas ocho versos los analizados en los que Marta Sánchez repite una y otra vez palabras como “corazón”, “nacer”, “aquí” u “honrar”. Ripios y rimas consonantes que Martínez ha marcado, para más cachondeo, en rojo y gualda y en los que ha encontrado la “influencia de Pemán” pero también la de Leonardo Dantés, quien también escribió una letra para el himno con menos éxito que la de Marta Sánchez.
Su crítica, que ha cosechado varios retuits y me gusta en Twitter, también ha recibido varias respuestas que Martínez no ha dejado pasar, con menciones a otros hinchas como Mariano Rajoy, Xabier García Albiol y la Guardia Civil.
Rojo, amarillo, colores que brillan en mi corazón
— Miguel Martínez (@fusonegro) 19 de febrero de 2018
Es que si lo hace transitivo le jode la rima aguda en -í (que está muy bien para la poesía paródica)
— Miguel Martínez (@fusonegro) 19 de febrero de 2018
Sigo pensando que el "Franco Franco que tiene el culo blanco" es mucho mejor que este
— Edushkaia Beltranova (@EduBeltranEdu) 20 de febrero de 2018
Ese "no olvides que sin ti no sé vivir" también podría ser un homenaje al mítico verso de Santa Teresa.
— Carlos Mayoral (@LaVozDeLarra) 21 de febrero de 2018
¿Y qué pasó con el tachín tachín? Ahora sólo falta que Rajoy se ponga de guionista... ¿alguna secuela de una antigua película del gran Jaime de Andrade? La cortina musical ya la tiene.
— Marcos Wasem (@marcwasem) 20 de febrero de 2018
Del nivel del Hawaii Bombay o del azul como el mar azul.
— Dani Lasierra |\/| (@dlasib) 21 de febrero de 2018
Pero qué nota ha sacado?
— Amèlia (@SBDMLP) 21 de febrero de 2018