El pasado sábado, en la ciudad de Los Ángeles, tuvo lugar la retirada de una estatua de Cristóbal Colón que se erigió hace 45 años en el Grand Park. Se trata de una moción aprobada el año pasado y que sustituirá el Día del Descubrimiento por el Día de los Pueblos Indígenas.

El concejal demócrata, Mitch O’Farrell consideró que la eliminación de la estatua es un “paso natural en los avances para eliminar la falsa narrativa de que Colón descubrió América”. Es más, sostiene que el propio Colón es el responsable de “atrocidades y sus actos contribuyeron al mayor genocidio jamás registrado”. O’Farrell, miembro de la Nación Wyandot de indios americanos, destaca que “su imagen no se tiene que celebrar en ninguna parte”.

'Un día de cólera'

Unos comentarios y unos hechos que no han gustado mucho a según qué personas en el otro lado del charco. Arturo Pérez-Reverte ha sido una de las personas que más crítica se ha mostrado con las declaraciones de O’Farrell y, sobre todo, con la retirada del monumento colombino.

El escritor ha cargado duramente contra el concejal demócrata de Los Ángeles a tenor del apellido del propio Mitch. Reverte entró en cólera a través de Twitter y le dedicó una serie de tuits en la red social apoyándose en teorías positivas sobre la imagen de Cristóbal Colón y atacando al origen anglosajón del concejal, alegando que fueron sus antepasados los que “apenas dejaron en Norteamérica indio vivo ni familia criolla”.

Es más, el escritor le reprocha que cuando construyeron catedrales y universidades “lo hicieron sólo” para aquellos que tenían origen sajón y no criollo ni indio. Tras esto, compartió un hilo con las bondades del Descubridor y elaborado por el periodista conservador Luis del Pino.