En más de una ocasión se ha hablado, y se repite de manera constante por parte de autoridades y fuerzas de seguridad, de la necesidad de hacer un uso responsable de la tecnología por parte de los niños. Éste, junto con la propia tranquilidad de los padres, son el objetivo de Talkyds, una aplicación de mensajería para móviles y tabletas similar a WhatsApp, creada en Córdoba.

Los menores empiezan cada vez a edades más tempranas a utilizar móviles, redes sociales y servicios de mensajería, y no siempre bajo la supervisión de sus padres o con la información suficiente para asumir que, además de una forma de relacionarse, también son una fuente de riesgos.

Precisamente, todos los que están detrás del proyecto cordobés presentan un denominador común: son progenitores preocupados por la exposición de sus hijos al mundo de las redes sociales y los servicios de mensajería instantáneos que hoy se han convertido en la fuente de comunicación más habitual en el primer mundo.

Cubre una necesidad

En palabras de Ricardo Molleja, director comercial de Talkyds, la empresa nace ante la ausencia de un producto capaz de aportar seguridad. En este sentido, y después de varios encuentros, la idea superó esa fase para convertirse en proyecto y ahora en una realidad.

¿Y qué distingue a Talkyds del resto de aplicaciones de mensajería? En primer lugar que es imposible que un menor se registre sin el concurso de sus padres, que pueden monitorizar la actividad comunicativa y detectar rápidamente si hay riesgo de ciberacoso.

"Hay que aclarar que esta aplicación no ha nacido para controlar a los niños. Lleva un sistema de control, pero lo que pretende es que adquieran unos hábitos de uso responsable para cuando utilicen otros sistemas como WhatsApp o Facebook", asegura Molleja, añadiendo que Talkyds se ha desarrollado bajo el asesoramiento de los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.

Sólo los padres pueden aceptar solicitudes de amistad

Entre sus principales características está el gestor de contactos, que permite que los padres sean los únicos que puedan aceptar solicitudes de amistad y evitar que se agreguen a desconocidos, dado que, según datos del Ministerio del Interior, "un tercio de los contactos que tienen los menores son desconocidos".

La aplicación estará disponible ya este lunes y ha contado con el asesoramiento de Policía y Guardia Civil. (Foto: EFE)

Además, incluye un gestor de tiempo de uso para que los niños utilicen la aplicación en franjas horarias que no sean de estudio o sueño; un sistema de envío de imágenes que impide el almacenamiento o captura de las mismas por parte del receptor, o un sistema de localización.

Otra de sus funcionalidades, una de las más destacadas, es su detector de palabras ofensivas pensado para evitar casos de acoso cibernético. A juicio del representante de la app, "sabemos que muchos niños cuando son acosados no lo cuentan, y este servicio hace que, cuando el menor usa lenguaje ofensivo, tanto el padre del emisor como el del receptor reciban una alerta".

De hecho, Talkyds no sólo penaliza el lenguaje ofensivo, sino que también premia el uso correcto de la gramática, y lo hace con un sistema de recompensa por puntuación que permitirá a los menores participar en un sorteo para conseguir premios.

Aplicación "sin competencia"

Esta serie de requisitos son, según su director comercial, los que hacen de Talkyds una aplicación "sin competencia", ya que, aunque existen sistemas de chats para niños, ninguno reúne todos estos filtros de seguridad.

En tiendas digitales desde el lunes -y descargable de forma gratuita durante los primeros seis meses-, Talkyds cuenta con el visto bueno de los padres que la han probado y que han corroborado, según Molleja, que "hacía falta algo así".

El desarrollo del proyecto hasta que este lunes esté a disposición de todo el mundo se ha prolongado durante más de dos años. La financiación ha sido con fondos propios, a la espera de que les abra las puertas de la inversión privada o de las subvenciones tecnológicas.

En el horizonte a corto plazo, el objetivo es la expansión nacional y la captación de clientes en países de habla hispana, para, en una segunda fase, adaptarlo a otros idiomas y lanzarse a países europeos cercanos.