Según ha adelantado la Cadena SER, la Audiencia Nacional ha identificado contratos amañados por valor de más de 200 millones de euros durante la era de José María Aznar. La Intervención general del Estado ha analizado para el juzgado número 5 de la AN, que investiga los cohechos de la caja B del PP, nueve contratos públicos y ha hallado el modus operandi de la trama.

Los hechos están relacionados un donante confeso: Alfonso García Pozuelo. Durante el juicio de la primera etapa de la Gürtel admitió haber mediado para que Francisco Correa, el cabecilla de la trama, obtuviera contratos con distintos ministerios a cambio de comisiones. Por su parte, Correa declaró que el empresario Garría Pozuelo en efecto, hacía las veces de intermediario.

En este sentido, se han analizado nueve contratos públicos adjudicados durante la etapa de Aznar a García Pozuelo y se han hallado similitudes que apuntalan la teoría de cómo operaban.

Todo se movía en los márgenes de la legalidad y, a ojo de buen cubero, no había problema alguno pues los contratos se adjudicaron mediante concurso público. Sin embargo, una vez adjudicado, el contrato sufría modificaciones al alza que aumentaban el precio en un 19,9%.

Este techo es la cifra mágica, pues de llegarse al 20% se debía informar al Consejo de Estado.

Entre los contratos investigados figuran cuatro relacionados con tramos del AVE, un proyecto del SEPES, las obras del parador de Lorca y una comisaría de Policía en Xirivella (Valencia), según informa el citado medio.