Durante un debate virtual organizado por fundaciones ultracatólicas en el que han participado el exministro de Interior Jaime Mayor Oreja y la también conservadora María San Gil, se ha propuesto eliminar el derecho a voto a los parados.

El debate, titulado "¿El fin de nuestro modelo de sociedad? Un debate tras el Covid-19", los fundamentalistas católicos han despotricado contra la situación actual y la gestión socialista de la crisis. 

El terrible postulado de quitar a los parados su derecho a voto ha sido propuesto por el presidente de la Fundación Villacisneros Íñigo Gómez Pineda: "Partiendo de la base de que para gobernar en España se necesitan entre 10 y 11 millones de votos, y asumiendo que hay un alto porcentaje de conversión de votos hacia la izquierda desde la población con fuentes de ingresos únicos o sin ingresos, al actual gobierno le interesa claramente subir el porcentaje de este grupo de población. De esta manera pueden captar nuevos votos".

Y añade: "Y dejo una iniciativa en el aire. ¿No se podría pensar en que todo aquel que está subvencionado o pagado por el Estado pierda el derecho a voto? Ahí lo dejo".