Los próximos exámenes de la EBAU y la nota de corte de la carrera y universidad deseadas traen de cabeza esta semana a muchos jóvenes y sus familias. Estrés, horas de estudio y de insomnio se instalan estos días en muchos hogares españoles. ¿Y si no consigo entrar donde quiero?

El 41% de los jóvenes españoles entre 25 y 34 años tiene estudios universitarios. Pero lejos de ser una garantía para su futuro profesional, España cuenta con un alto porcentaje de jóvenes sobreformados que no encuentran una salida acorde a sus titulaciones en el mercado laboral.

Las titulaciones universitarias ya no son garantía para las compañías que buscan profesionales con capacidades y habilidades concretas más allá de los conocimientos teóricos adquiridos en las aulas, una realidad con la que se topan a diario los reclutadores de grandes compañías, sobre todo cuando se trata de captar talento en áreas concretas como la informática o la programación.

 

Un Curriculum muestra lo que has estudiado o lo que has hecho en el pasado, pero no lo que eres o serás capaz de hacer en el futuro. En áreas como la programación, en las que la tecnología avanza tan rápidamente tener una titulación no es garantía de casi nada, porque los conocimientos adquiridos en muchos casos se quedan obsoletos antes de abandonar las aulas”. “Lo que las empresas buscan son profesionales con capacidad para resolver nuevos problemas y habilidades para aportar nuevas soluciones, y eso no se enseña ni se aprende en los planes de educación vigentes”, explican distintos reclutadores de talento de grandes compañías.

En Estados Unidos y otros países hace años que triunfan nuevos modelos educativos que promueven sistemas de aprendizaje más práctico que los modelos tradicionales y teóricos a los que estamos acostumbrados en España. Además, aplican lo que se ha llamado “aprendizaje Peer to Peer", es decir, hacer que los alumnos aprendan unos de otros a través del desarrollo de proyectos en equipo. Con esta pedagogía se promueve la implicación de los alumnos en su propio proceso de aprendizaje ayudando a sus compañeros y aprendiendo de ellos. Es el caso por ejemplo de las escuelas Holberton en San Francisco o École 42, en París, para formar programadores, CTOs y emprendedores tecnológicos.

En España aún no existen escuelas de este tipo, pero el próximo enero abrirá en Madrid IMMUNE Coding Institute, una institución que nace para dar respuesta a este gap entre el tipo de profesionales que demandan las grandes compañías y la oferta formativa actual. La necesidad es tal por parte de las empresas que varias corporaciones, no solo se están implicando en el diseño de los programas formativos con casos reales a resolver por los alumnos, sino que, además, financiarán los estudios de aquellos estudiantes que vayan superando los retos que les planteen. Las prácticas en empresas desde el primer año y la ausencia de profesores son otras de las características de este nuevo Instituto que pretende ser la cantera en la que se formen los futuros CTOs, programadores y profesionales TIC que se rifen las grandes corporaciones en los próximos años.

Hay opciones más allá de la EBAU y de la Universidad tradicional, y además con grandes salidas profesionales. La estimación de la Comunidad Europea es que, en 2020, se necesitará cubrir 500.000 puestos de trabajo de coders en Europa.