Una ciudadana anónima, María Victoria Modolell, fallecida en octubre de 2017, ha dejado una herencia de 8,3 millones de euros a la Universidad de Vic y a Cáritas, para becas y ayudas a estudiantes de estudios superiores, menores con escasos recursos y mayores. Ninguna de las dos beneficiadas había oído hablar de la mujer.

Un importante patrimonio inmobiliario

El patrimonio de María Victoria Modolell formado por inmuebles, especialmente en Barcelona, dinero en efectivo y participaciones en empresas, deberá ser gestionado por la Universidad y Cáritas. El vínculo de la mujer con Vic era a través de su esposo, Carlos Calderó, fallecido seis meses antes que ella.

María Victoria Modolell era hija del procurador de tribunales y empresario inmobiliario Josep Maria Modolell y nieta del industrial Santiago Trias, exconsejero del Banco de España y accionista del Banco Urquijo, según datos de El País.

Modolell no tuvo hijos y se casó con Carlos Calderó, que era propietario mayoritario de la Casa Calderó, un palacete barroco patrimonio de Vic y propietario de un importante conjunto de activos inmobiliarios y terrenos.