Los tiempos cambian, los conceptos tradicionales se modifican, la forma habitual de ver y comprender evoluciona, nadie ni nada está salvo del continuo devenir de las cosas. No podemos aceptar por válidas ningunas de las cuestiones que a lo largo del tiempo hemos creído que eran verdades absolutas. La realidad, la visión de la belleza, la comprensión de las cosas, los gustos, los razonamientos, todo es tan mutable como la carne en la que habitamos.

Los aspectos de una casa tradicional, sin ir más lejos, están cambiando radicalmente. En la actualidad se busca rendimiento energético, rapidez y economía en su construcción, estilo estético adaptable a los gustos de los propietarios, una casa que cumpla con cada una de las necesidades de sus inquilinos. Lejos queda el gusto por bloques de pisos de mediados del siglo pasado que inundan en la actualidad las ciudades y se asemejan a nichos de cementerio.

Todo cambia, y el aspecto arquitectónico de las ciudades deberá iniciar ese camino más temprano que tarde. A esta necesidad de cambiar las ciudades, para hacerlas más atractivas y eficientes medioambientalmente hablando y para el gusto de los inquilinos que buscan hogares con las características antes mencionadas, viene a ofrecer su colaboración y soluciones la empresa The Concrete Home, casas prefabricadas de hormigon, con más de 30 años de experiencia en este sector.

Estos profesionales se han dedicado a construir casas prefabricadas de hormigón y con ello a cumplir los sueños de cientos de familias que han visto crecer ante ellos la casa con el diseño más apropiado para sus necesidades. Además, sus nuevas viviendas prefabricadas de hormigón han sido construidas en tiempo récord y por precios sin posibilidad de comparación con las tradicionales edificaciones de obra.

Ventajas de elegir viviendas prefabricadas de hormigón

Hemos visto muy someramente las ventajas de construir y vivir en una vivienda de este tipo. En este apartado analizaremos los cinco puntos más profundamente por los cuales se considera acertada la decisión de sustituir la edificación tradicional por estas otras más modernas y que para muchos es ya la vivienda del futuro.

La principal ventaja que encontramos es la reducción de precios, entre un 22 y un 35% más económicas, teniendo en cuenta las diferencias entre las dimensiones, la distribución, los materiales y los acabados, en comparación con una tradicional de obra, y esto se debe a que el sistema de producción de estas viviendas está creado para optimizar la mano de obra y, por lo tanto, ahorrar en el tiempo de ejecución, en algunos casos llegando a ser hasta un 70 % de tiempo menor.

En este sentido, al ser construidas en todo o en gran parte en fábrica, usando técnicas y procesos industriales, la construcción es mucho más eficiente en cuanto a calidad, localizando fallas y solucionando errores antes de la salida de la fábrica, acelerando igualmente los tiempos de entrega que rondan entre los cuatro o cinco meses.

Por otra parte, este tipo de fabricación de inmuebles no posee un único sistema de elaboración, por lo que ofrece una ventaja desconocida para el gran público, la posibilidad de ser personalizada por el cliente. Tanto si la construcción es modular como si solo se refiere a los acabados, las posibilidades de añadir personalidad y originalidad a la vivienda son enormes.

La gran diferenciación a largo plazo con las viviendas habituales es su eficiencia energética, pues llevan incorporados procedimientos de control de calidad con estándares muy por encima de las tradicional que se construye “in situ”.

Las casas prefabricadas en hormigón poseen la cualidad de generar calor por sí mismas manteniendo temperaturas estables en el interior de la vivienda, entre los 12 y los 15 grados en invierno en aquellos lugares donde la temperatura exterior ronda entre los -5 y los 12 grados, en contraposición al sistema tradicional que obliga a que sean construidas con puentes térmicos, obligándolas a presentar porosidades y permeabilidades, generando en su día a día grandes cantidades de pérdidas de energía. Todo esto se resume en un mayor respeto por el medio ambiente.

Al mismo tiempo, las viviendas prefabricadas, que se caracterizan por ser muy respetuosas con el medio ambiente, se elaboran con sistemas que apenas generan residuos aportando soluciones más eficientes y actualizadas que los convencionales.  En estos tipos de construcción la eliminación de residuos está mucho más reglamentada, vigilada y es, por tanto, mucho más exigente que la tradicional, permisiva en este sentido en demasía.