El 1 de mayo de 2014, un grupo de mujeres de una asociación feminista salieron a la calle para manifestarse por los derechos de las mujeres y del aborto. Para ello sacaron en procesión una vagina cubierta con un manto emulando la imagen de una virgen. Es lo que se conoció como “la procesión del coño insumiso”.

Ahora, más de tres años después, tres de las organizadoras de este acto serán juzgadas acusadas de un supuesto delito contra los sentimientos religiosos.

Una causa que fue archivada

Aunque la causa fue archivada, en marzo de este año el caso fue reabierto. Este martes, la jueza titular del Juzgado de Instrucción 10 de Sevilla ha abierto juicio oral contra estas tres mujeres que marcharon con la imagen de la vagina durante las manifestaciones del Día Internacional del Trabajo del 1 de mayo.

La denuncia fue presentada por la Asociación de Abogados Cristianos y ha sido la misma jueza la que en un principio archivo el caso y ahora ha decidido iniciar la fase de juicio oral. Antes, entendió que con su protesta las activistas no "humillaron los sentimientos religiosos de terceros" porque, aunque coincide en que llevaron a cabo una “burla”, “no consta se hiciera con el fin de menoscabar, humillar o herir los sentimientos religiosos de terceros". 

Ahora, tendrán que sentarse en el banquillo no sin antes hacer entrega de una fianza de 3.600 euros para poder cubrir la multa pedida por Abogados Cristianos.

Para la acusación: una acción “vejatoria”

Fiablemente la justicia ha tomado en cuenta el recurso presentado por esta asociación que ya ha presentado más de una denuncia por delito contra los sentimientos religiosos.

Esta asociación considera que el uso de esa vagina es una acción "vejatoria" porque la imagen fue acompañada de gritos como “la Virgen María también abortaría” o “hay que quemar la conferencia episcopal por machista y patriarcal”