La Fiscalía de la Audiencia Nacional ha solicitado una pena de 50 años de prisión para siete detenidos por la agresión a dos guardias civiles y sus parejas el pasado 15 de octubre en Alsasua (Navarra). La justicia considera que estas personas son los autores de cuatro delitos de lesiones terroristas.

Por ello, según han informado fuentes jurídicas, el fiscal pide que a estos siete procesados se les condene y se les imponga una pena de 12 años y medio de cárcel por cada uno de estos delitos de lesiones terroristas. Para una octava procesada, se pide 12 años y medio de prisión por un delito de amenazas terroristas.

Ya en junio, fue el Tribunal Supremo el que alertó de que se podría estar hablando de un posible delito de terrorismo al juzgar estos hechos y, por ello, decidió enviar el caso y dar competencias de investigación a la Audiencia Nacional.

Lesiones y amenazas terroristas

Concretamente el Supremo consideró que las agresiones de Alsasua podían reflejarse en el artículo del Código Penal que considera delito de terrorismo la comisión de cualquier delito grave contra la vida o la integridad física cuando se lleva a cabo con la finalidad de provocar un estado de terror en la población o en una parte de ella.

Mientras tanto, la Audiencia Provincial de Navarra reclamó el caso, pero finalmente llegó a la audiencia nacional al tratarse de delitos posiblemente relacionados con el terrorismo.

Agredidos por medio centenar de personas

En la madrugada del pasado 15 de octubre de 2016, dos agentes de la Guardia Civil destinados en Alsasua (Navarra) y sus parejas fueron agredidos por un grupo de aproximadamente 50 personas en la localidad navarra, en las inmediaciones del bar Koxkacuando.

El teniente y el sargento de la benemérita resultados heridos al igual que las dos mujeres que los acompañaban.

Tras el suceso llegó la polémica y el revuelo político. Mientras diferentes colectivos se movilizaban en manifestaciones y solidarizaban con los agredidos, algunos grupos políticos como Podemos sembraron las dudas de que esta agresión debiera de ser tratada como si fuera un acto de terrorismo.