Subtítulo: Se abren diligencias para estudiar si el autor del texto que dice: “una cosa es el homosexual discreto y respetable y otra muy distinta el maricón ostentoso”, incurre en un delito de odio

Solo con ver el título se podía intuir el contenido del artículo: ‘La homosexualidad es pecado’. Así daba comienzo el texto publicado en la revista ‘El Mariñán’, que edita la Asociación de Empresarios de la localidad coruñesa de Sada, y que ha protagonizado muchos titulares en las últimas semanas, sobre todo en Galicia.

Lo firmaba un abogado, Eduardo Lorenzo, directivo de esta agrupación que llevaba más de tres años escribiendo en la citada publicación.  Sus palabras, como no podía ser de otra manera, además de un aluvión de críticas, motivaron una concentración en señal de repulsa en el municipio y dos dimisiones, la del propio autor y la del presidente de la junta directiva del colectivo, Bernardo Valiño. Su renuncia, sin embargo, no estuvo acompañada de palabras de disculpa, ya que en todo momento ha mantenido que el texto “no pretendía ofender a nadie, sino que respondía a las necesidades de conseguir una publicación atractiva y polémica para conseguir anunciantes”.

La Fiscalía decide

Que la publicación “era más que ofensiva”, lo denunció desde el principio la Asociación por la Libertad Afectiva y Sexual de A Coruña, que llevó el texto a la Fiscalía Provincial, que ha abierto diligencias. Estudiará si el autor incurre en un delito de odio en su artículo.

En el texto, en el que se equipara la homosexualidad con el incesto y la poligamia, podemos encontrar frases como: “una cosa es el homosexual discreto y respetable y otra muy distinta el maricón ostentoso”, que “el Día del Orgullo Gay en Madrid a un desfile en el que pululan lo grotesco, lo carnavalesco, con engendros, andróginos y estrógenos con patas” o que «los derechos de las personas con pluma, actualmente, son equiparables a los que llevan un modelo de vida tradicional”.

El autor se defiende

Su autor, Eduardo Lorenzo, sigue sin ver nada reprochable en el texto. Se disculpó, a su manera, alegando que “no fue ofensivo, en cualquier caso, es una opinión personal”. A juicio del abogado este tema “sigue siendo tabú”, y, lejos de rectificar, ha ratificado lo dicho, destacando que “se puede prestar a múltiples interpretaciones”.