La semana pasada Fran Rivera prendió las redes con un bidón de gasolina. Su participación en Espejo Público le está granjeando una fama de pisacharcos desconocida. Claro, que antes no hablaba tanto como ahora, que es cuando le han puesto un micrófono delante para tratar temas sociales de actualidad. El diestro se preguntó si hay que dejar de ducharse para ser antitaurino. Los tuiteros reaccionaron con dureza y le recriminaron estas "clasistas" palabras del torero. 

De nuevo en el espacio de Susanna Griso, el torero ha aprovechado el programa de este jueves para retractarse, aunque a su manera. "Aquí el tema no es la ducha o la no ducha, son las formas. Es el antitodo: el antitoros, antiEspaña, antiPodemos, antiPP... me parece muy bien que a alguien no le guste algo, pero se está perdiendo en España el respeto", afirma Rivera. 

El torero siguió con su discurso de pseudoarrepentimiento defendiendo su profesión. Pide "disculpas" puesto que su intención no es "ofender a nadie". "Pero el tema es que tenemos que aguantar todo lo que tenemos que aguantar: insultos, amenazas... porque nos acosan allí donde vayamos públicamente", añade Rivera. 

"Se ríen cuando se muere un torero, se ríen cuando se muere un niño. Cuando toreé con mi hija... las cosas que tuve que escuchar escritas y habladas, deseándole la muerte a mi hija, alegrándose de la muerte de mi padre. El respeto en este país se ha perdido y los que estamos demostrando más respeto en este sentido somos los taurinos". Aquí está el arrepentimiento del torero, pero deja también su pullita.