El coordinador federal de Izquierda Unida, Alberto Garzón, ha asegurado que la izquierda debe conformar un proyecto "atractivo" para el próximo ciclo electoral ante la posibilidad todavía "remota" de un gobierno de coalición PP y Vox, algo que califica de "profundamente peligroso para las libertades y lo público".
Por eso, ha detallado que la vicepresidenta segunda, Yolanda Díaz, es el "mejor activo" para lograrlo y que tanto IU como Unidas Podemos deben "protegerla" para que "encarne ese nuevo proyecto", cuyo objetivo es ensancharse y "sumar a mucha gente que se quedó por el camino".
Lo ha dicho durante su discurso en la reunión este sábado de la Coordinadora Federal del partido. Allí, Garzón ha vuelto a advertir que existe una "ola reaccionaria" a nivel internacional con un espacio "creciente" de los valores conservadores. Esa dinámica, dice, puede materializarse en la opción de una coalición entre "la derecha y la ultraderecha" para gobernar, una posibilidad que suscita "preocupación" en su organización aunque aún están "lejos" los comicios generales.
"No debemos olvidar que esa posibilidad es enormemente peligrosa para los intereses de la clase trabajadora y enormemente peligrosa para los intereses del proyecto político que hemos defendido desde IU", ha explicado.
Una alternativa ilusionante
Así, el también ministro de Consumo ha emplazado a trabajar de "manera urgente y concienzuda" para presentar desde la convergencia Unidas Podemos una alternativa a la opción conservadora que sea "atractiva e ilusionante" para los jóvenes, la clase trabajadora y los ecologistas, entre otros sectores.
Por tanto, tras la salida del exvicepresidente Pablo Iglesias, ha afirmado que el proyecto de la izquierda progresista debe "mejorar" porque aspira a la "mayoría". Ha apostado por un espacio "amplio de confluencia" que debe sumar lo máximo posible desde la sensibilidad progresista.
Tras indicar que la elección de Díaz como posible candidata fue un "acierto colectivo", el líder de IU ha asegurado que están obligados a potenciar su espacio para proteger a las clases populares y humildes, más vulnerables a las "agresiones sistemáticas económicas y políticas" de las derechas.
"Nuestra apuesta en la última Asamblea Federal fue clara. Apostar por un espacio amplio de confluencia, apostar por sumar a mucha gente que se ha quedado por el camino, a todas aquellas personas comprometidos con nuestro proyecto, independientemente de donde han estado antes. Sumar y sumar a más gente para ser atractivo y útiles a la sociedad", ha zanjado.
