Ferraz y Moncloa barajan un escenario sin presupuestos, y, lo que es más importante, en la sede de los socialistas aumenta el temor al desgaste y al coste que una posible negociación con los independentistas pueda acarrear. El mensaje de que Pedro Sánchez regala, favorece o se entrega a Catalunya es letal de cara a los comicios municipales y autonómicos del próximo mes de mayo.


Los partidarios de que las elecciones generales sean en marzo explican también que este año el 8-M, día de la mujer, será especialmente potente y favorable a la izquierda. 


Otros, no obstante, son partidarios de convocar en octubre; intentar en este tiempo tener presupuestos y, si no, gobernar a golpe de decreto. Creen que hay que rentabilizar la subida del salario mínimo, de las pensiones y de los sueldos de los funcionarios, además de cumplir la promesa de sacar a Franco Del Valle de los Caídos.

¿Cuándo habrá entonces eleccioes? La respuesta sólo la tiene Pedro Sánchez.