Salvador Sostres, articulista de 'El Mundo' Salvador Sostres, articulista de 'El Mundo'



Si está Salvador Sostres por medio, la polémica está servida. Y eso fue lo que sucedió en El gato al agua de Interconomía, donde se debatía la educación en España. El columnista de El Mundo conectó en directo con el programa para cargar contra la izquierda, a la que acusó de ser “un cáncer” para el sistema educativo, que, según afirmó, está en sus manos.

La izquierda, "casposa y reaccionaria"
“El principal cáncer de la educación en España es que está en manos de la izquierda”, gobierne quien gobierne, y los profesores afines “actúan con resentimiento, mala leche y un sectarismo atroz, casposo y reaccionario”, producto de que la izquierda “siempre pierde las batallas porque está equivocada”, aseguró Sostres.

Causante de las peores matanzas de la humanidad
El polémico opinador conectó con el programa después de que la diputada de Izquierda Unida Tania Sánchez Melero, presente en la tertulia, dijera que “se quiere imponer una reforma educativa que cuenta con la oposición de todo el mundo” y que sería “una barbaridad, poco edificante” que hubiese que comentar en Selectividad un texto como el de Salvador Sostres, quien defendió en otra tertulia de El gato al agua que debería prohibirse a las mujeres acudir a restaurantes de más de cien euros”.

Sostres calificó de “censora, como siempre”, a la “vieja guardia de la izquierda”, que, según señaló, “en los breves momentos en los que ha gobernado, se han conocido las peores matanzas de la humanidad”. “Han devastado al mundo con pobreza”, y ahora esta “gentuza intenta destruir las mentes de los niños”, añadió el columnista de El Mundo.

El machismo...y la mediocridad de Sostres
La diputada contestó que lamentaba “profundamente de haber mentado a este personaje” porque la “actitud rupturista” del polémico artículo “posiciona a los hombres por encima de las mujeres, y ese machismo provoca que este año llevemos 31 muertas en España” por violencia doméstica. A lo que Sostres contestó que su columna de opinión debía ser leída con “sentido del humor”, y que “atribuirle las muertes de mujeres es lamentable, triste y poco inteligente”.

“Y la mediocridad es decir barbaridades que no te crees ni tú mismo”, le contestó la parlamentaria.