El portavoz parlamentario de Esquerra Republicana (ERC), Gabriel Rufián, ha advertido este miércoles al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, del riesgo de culpar a los jóvenes de los disturbios de los últimos días por el encarcelamiento del rapero Pablo Hasél porque, a su juicio, eso sólo provocará "más desafección y más abstención" pero también más votos para "la ultradrecha" en referencia a Vox.

Durante su intervención en el Pleno del Congreso, Rufián ha defendido que las protestas en las calles no responde únicamente a lo ocurrido con Hasél sino que es la respuesta de toda una generación que sólo ha conocido "crisis, precariedad y exclusión".

"Ésa es la causa, y cuando la política fracasa, se ocupa la calle. Y es que la quema de un contenedor no es más que la culminación de quemas más severas", ha llegado a decir el independentista catalán, alertando de que los contenedores pueden reponerse pero la esperanza, no.

La juventud "está desesperada"

Y hoy, según ha destacado, España cuenta con toda una generación "desesperada", una generación que no sólo se siente "olvidada" sino "humillada" y "señalada" y a la que se le acusa de vivir "anestesiada" frente a las pantallas sin analizar que quizá las condiciones de su entorno son la causa de ello.

"Si culpabilizar a los jóvenes de los contagios fue una salvajada, responsabilizarles de la violencia en las calles es un suicidio político, sobre todo para ustedes", ha avisado a la bancada azul para añadir que si siguen en ese camino estarán regalando a la juventud "a la desafección, a la abstención y a la ultraderecha, por este orden".

Durante su alocución, Rufián también ha avisado de la "desconfianza" que el "Jumanji" de la gestión de la pandemia del Covid ha provocado y que, según augura, prevalecerá tras el Covid, la desconfianza de la ciudadanía hacia sus políticos, de los políticos hacia la gente y de los políticos entre sí.

Pero también del riesgo de que el "golpismo" lo tenga ahora "mucho más fácil" que hace 40 años, en alusión a que Vox siga entrando "a paladas" en los parlamentos autonómicos. "Ya no hace falta enviar a un fanático con un tricornio al Congreso; hoy los golpes de Estado no son con militares con editoriales y digitales", ha enfatizado.