Y comienzan las represalias contra los diputados socialistas que, rompiendo la disciplina de voto, dijeron y votaron “no” a Mariano Rajoy durante su investidura. Finalmente fueron 15 y, este lunes, esa quincena ha recibido una carta.

Con ella, el grupo socialista del Congreso da por abierto el procedimiento y el expediente sobre sus compañeros, unas medidas que serán menos duras de lo que en un principio se llegó a rumorear. Finalmente, se habla de imponer sanciones económicas que oscilarían entre los 200 y 600 euros.

Antes de la votación de investidura, el presidente de la gestora, Javier Fernández, decía: "No está en mi cabeza expulsar a nadie en este momento". Parece que esa idea se ha asentado y será la que mandé. Al final, la expulsión del partido ha sido sólo una opción barajada. De ser una realidad, el PSOE perdería tantos diputados que se convertiría en la tercera fuerza del Congreso.

7 días para explicarse

En la carta que han recibido los defensores del “no es no”, se les aclara que tienen 7 días para presentar sus alegaciones, para explicar por qué decidieron romper la disciplina de voto acordada en el Comité Federal. Así lo dice el reglamento interno del grupo socialista, los que voten diferente tiene que ser escuchados.

¿Qué pasará con el PSC? De momento sus diputados ya han contestado y aseguran que seguirán trabajando por la unión del PSOE y el PSC. Si votaron "no" en vez de abstención fue por "conciencia".