La congregación religiosa se había comprometido a terminar en un plazo máximo de 13 meses tres aulas por curso desde bebés a preuniversitarios, cuando el Ayuntamiento gobernado por el popular Arturo González Panero, implicado en la trama Gürtel, le cedió una parcela en 2007. Aun faltan tres edificios por construir porque las obras no han avanzado nada desde 2010, informa El País.

El nuevo alcalde zanja el asunto con una simple multa
El actual alcalde, también del PP, Antonio González Terol, aprobó el pasado viernes en un pleno el cambio de sanción. No rescindirá el contrato para recuperar la parcela, sino que impone una multa de 3.000 euros por cada mes de retraso en la construcción.

UPyD apoya al alcalde
La congregación dispone ahora de nuevos plazos. Tiene que solicitar la licencia antes de cuatro meses y entonces dispondrá de otros seis para acabar la construcción, según el acuerdo que se aprobó en el pleno con los votos a favor de PP y UPyD y contrarios de PSE y Alternativa por Boadilla (ApB).

El PSOE y ApB, en contra
La oposición critica al alcalde popular. El concejal Pablo Nieto considera que el Ayuntamiento “está defendiendo los derechos de los Legionarios en lugar de los de los ciudadanos”, y pide que se recupere la parcela. También el edil Ángel Galindo (ApB) cree que se “debería volver a ser de uso de todos los vecinos una vez terminado el curso, para no perjudicar a los alumnos”.

En el centro estudian 322 alumnos (separados por sexos) desde el primer ciclo de Infantil hasta 5º de Primaria. Las familias pagan 1.400 euros de inscripción y mensualidades de 395 a 456 euros.