La presión mediática y política ha conseguido, finalmente, que el fondo de inversión Blackstone renueve el contrato a la presidenta de la asociación de afectados por la venta de viviendas de la EMVS, Arancha Mejías y a su familia.

La delegada de Equidad, Derechos Sociales y Empleo, Marta Higueras, lo ha informado, en un comunicado, tras la reunión mantenida por la alcaldesa, Manuela Carmena, con el presidente del fondo de inversión en España."El Ayuntamiento de Madrid, tal como se comprometió el pasado septiembre, de prestar apoyo institucional a la familia de Arancha Mejías,ha conseguido desbloquear la situación de esta familia gracias a una reunión mantenida entre la alcaldesa, Manuela Carmena, con Claudio Boada, representante del fondo de inversión Blackstone".

En esa reunión, la alcaldesa consiguió el compromiso firme del fondo de ofrecer a Arancha Mejías "el mismo contrato de arrendamiento que han firmado ya muchos de los inquilinos de estas viviendas, respetando así sus derechos en la misma medida que la del resto de los vecinos", según anuncia en un comunicado el Ayuntamiento.

La carta remitida por el portavoz socialista
El anuncio de la reunión de la alcaldesa con Claudio Boada llega tres días después de una carta enviada por el concejal socialista Antonio Miguel Carmona al presidente de Blackstone en España, en la que le pedía "responsabilidad corporativa", y que parara los desahucios de las viviendas sociales compradas por este fondo de inversión a la EMVS, en 2013, durante el Gobierno de Ana Botella.

El concejal socialista recordaba en su carta al empresario que la venta de las viviendas sociales había provocado "dos querellas criminales contra los representantes legales de la filial Fidere", en tramitación, y un informe de la Cámara de Cuentas sobre las "numerosas irregularidades" en el proceso del concurso.

El Grupo socialista en el Ayuntamiento de Madrid y las familias afectadas fueron los que presentaron esas querellas, como informó ELPLURAL.COM, después de que el juez rechazara, la semana pasada, reabrir el caso de la venta de 1.860 viviendas sociales de la Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo (EMVS). El Ayuntamiento de Carmena siempre ha manifestado que apoya a las familias, pero no había anunciado ninguna acción concreta.

Carmona critica la lentitud del Ayuntamiento
El socialista Antonio Miguel Carmona ha manifestado, en declaraciones a ELPLURAL.COM, su satisfacción porque la familia Mejías pueda renovar su contrato, pero ha lamentado que la decisión llegue tras su carta. “Ha habido lentitud por parte del Ayuntamiento y por parte de Blackstone. Han tardado demasiado en reaccionar. Agradezco el primer paso, pero esta familia no es la única con la amenaza de quedarse en la calle, hay 200 más afectadas sólo en Carabanchel”.

“Blackstone les ofrece contratos de 2 o 3 años, depende de los casos, y después les echan. El Ayuntamiento debe comprometerse a ofrecerles un contrato”, añade Carmona.