El ministro de Cultura y Deporte, Màxim Huerta, no cumplió con sus obligaciones fiscales en los ejercicios 2006, 2007 y 2008. El montante total de lo defraudado ascendería a 218.332 euros, según desvela El Confidencial. La inspección de Hacienda concluyó en 2012 que en esos tres años fiscales habría facturado un total de 798.521 euros por medio de su sociedad unipersonal Almaximo Profesionales de la Imagen SL. Esta sociedad, de la que era el único accionista, fue liquidada en 2016. No hubo delito porque el fraude no superó los 120.000 euros que marca la ley. El titular de la cartera de Ciencia ha respondido en una entrevista en Onda Cero, donde ha asegurado que está al corriente de pago y deja entrever que Pedro Sánchez no contempla su dimisión.