En apenas una semana Pedro Sánchez, cincel en mano, ha grabado en la historia dos nuevos hitos: es el primer presidente del Gobierno investido como consecuencia de una moción de censura y ha configurado el Ejecutivo con el mayor número de integrantes mujeres del mundo (11 de 17). Los nombramientos han sorprendido a muchos, pues no se trata de un Gobierno pensado para ser efímero ni modelado en una tarde. Sánchez ha apostado por perfiles técnicos, especialistas, independientes, socialistas, personalidades conocidas y de reconocido prestigio…Las designaciones han agitado el avispero político: se pueden invertir los flujos de votos y revertir la tendencia electoral de los últimos meses. ¿Cómo afectará el mandato de Pedro Sánchez a las pretensiones del Partido Popular, Podemos y Ciudadanos?

Sánchez cauterizará la sangría de votos y revertirá el flujo

El ascenso a los cielos de La Moncloa de Sánchez ha sido un duro varapalo para el Partido Popular. Las caras largas de los diputados, ministros, dirigentes y el propio Mariano Rajoy en el Congreso ya evidenciaban lo que estaba por venir. Su líder, Rajoy, lo deja y la formación se encuentra inmersa en un proceso de reestructuración completa con varios nombres sobre la mesa para pilotar el navío: Alberto Núñez-Feijóo, Soraya Sáenz de Santamaría, María Dolores de Cospedal, Ana Pastor e incluso Íñigo de la Serna se ha colado en las encuestas. Entretanto, el portavoz parlamentario Rafael Hernando azuza al PSOE insistiendo en que “no es un Gobierno pensado para gobernar” sino “pensado para el marketing”: “No me estoy distrayendo con su Gobierno pasarela”. Unas palabras que denotan nerviosismo, y no es para menos. Los nombramientos de Sánchez seducen a la derecha con nombres como Fernando Grande-Marlaska, ministro de Interior, a quien Pablo Iglesias ya ha criticado porque “es un ministro del PP”.

El efecto 'luna de miel' detendrá la subida de Ciudadanos y atraerá al votante 'popular'

El Ejecutivo vertebrado por el secretario general del PSOE puede reabrir un flujo de votos del PP al PSOE no solo por su composición, sino porque siempre que un partido llega al Gobierno se produce el denominado efecto luna de miel y sube en las encuestas.

Esta escalada también afectaría notablemente a Ciudadanos. Los de Albert Rivera estaban siendo los principales beneficiarios de la sangría de votos del Partido Popular por el asunto secesionista en Cataluña. No obstante, los nombramientos de Pedro Sánchez podrían no solo detener de golpe la subida de los naranjas en los sondeos, sino abrir un flujo de voto desde Ciudadanos al PSOE.

La designación de Josep Borrell como ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación; el sorprendente nombramiento del astronauta Pedro Duque como ministro de Ciencia, Innovación y Universidades; y los marcados tintes europeístas de perfiles como la ministra de Economía, Nadia Calviño, atraerán al electorado de Ciudadanos. De hecho, cabría preguntarse si Rivera hubiera votado favorablemente en la moción de censura de conocer de antemano este Ejecutivo o de cuántos de estos nombres hubieran encajado en un hipotético Gobierno naranja. Asimismo, las figuras tanto de Borrell como de Grande-Marlaska tumban dos de los ejes del argumentario de Rivera contra la candidatura de Sánchez: las concesiones a los partidos independentistas y el “pacto con EH Bildu”.

De hecho, Ciudadanos ve “correcto” -en palabras del responsable económico de Cs en el Congreso, Toni Roldán- el Ejecutivo esbozado por el líder socialista. Consideran que son “adecuados” y se limitan a criticar que desconocen su proyecto.

El presidente de la consultora GAD3, Narciso Michavila, en una entrevista en COPE, ha considerado que se trata de un gabinete electoralista “no solo por la cantidad de mujeres, que es un poco seguir la estela de la moda, lo cual nos alegra bastante”, sino por “la distribución territorial de las distintas captaciones”. A su juicio, el mapa electoral de hace una semana es completamente distinto al actual: confirma que el PSOE subirá en los sondeos, pero no se aventura a desvelar qué ocurre con el resto de colores. El domingo publicarán con 'ABC' la primera encuesta, que se ha cerrado este viernes.

Podemos, preocupado por si tocan sus buques insignia

Sánchez ha desactivado las críticas de la derecha, pero ¿qué ocurre con la izquierda del tablero? Podemos ha subrayado que otorgarán cierta “cortesía” pero ya le han reprochado que se haya olvidado de “quien le hizo presidente”, esgrimiendo que en su Gobierno ha incluido guiños hacia la derecha, pero no así a la izquierda (con la excepción de Dolores Delgado, ministra de Justicia de corte marcadamente progresista): “Ha sonreído a Cs y PP", eso “es toda una declaración de principios”.

Fuentes de Podemos no encuentran razones para precuparse porque creen que "su estrategia es recuperar el voto que se fue a Cs"

Iglesias lamentó que Sánchez haya declinado su invitación de construir un Gobierno fuerte con el apoyo de 156 diputados, y que haya preferido que su Ejecutivo esté sostenido solo por 84, lo que considera "imprudente" porque le convierte en el Gobierno "más débil de la UE".La pregunta es: ¿Afectará el Ejecutivo de Sánchez a las pretensiones de Podemos? Los de Pablo Iglesias tienen claro que su acción debe articularse en el Congreso para sacar adelante sus buques insignia legislativos pero sin renunciar a hacer oposición: "A nosotros nos va bien que le vaya bien a España y para que le vaya bien a España necesitamos acuerdos en el Congreso".

Según fuentes internas moradas consultadas por El Plural, el suflé del PSOE provocado por un Ejecutivo que despierta pasiones no les preocupa ya que “cómo nos va a perjudicar Nadia Calviño, Grande-Marlaska… Si hicieran gestos como derogar la Ley Mordaza, la reforma laboral o una mejora en las prestaciones de desempleo” sí que podrían abrir un flujo importante de votantes de Podemos hacia el PSOE, pero “no veo al actual Consejo de Ministros haciendo ninguna de esas cosas”.

En opinión de las mismas fuentes, “creo que tienen claro que su estrategia es la de recuperar el voto que se ha ido a Ciudadanos”. Además, consideran que los perfiles de los nuevos ministros y ministras no seducirán al electorado morado si no se hacen gestos.