Tres ministros no eran diputados. Los tres abandonaron sus puestos de trabajo para acudir a la llamada de Rajoy y, tras la moción de censura, los tres tienen que reincorporarse el mercado laboral. Estos son los exministros de Exteriores, Economía y Fomento; Alfonso Dastis, Román Escolano e Íñigo de la Serna. Mientras que los dos primeros son funcionarios y tienen el sustento asegurado, De La Serna, que es ingeniero de Caminos, lleva casi 20 años sin trabajar en el sector privado.
Dastis, diplomático sin destino
Alfonso Dastis es diplomático de carrera. Dejó la representación permanente de España en la Unión Europea para sustituir a José Manuel García-Margallo. Ahora volvería a reincorporarse al Cuerpo Diplomático, pendiente de que el nuevo ministro de Exteriores, Josep Borell, le asigne destino.
Escolano, si lo sé no vengo
Román Escolano era vicepresidente en el Banco Europeo de Inversiones, con un sueldo 270.000€ anuales y dejó el puesto para cobrar sensiblemente menos como Ministro de Economía en España. Ahora no puede recuperar ese puesto, que fue cubierto de nuevo cuando él volvió a España y tendrá que reincorporarse a su plaza de funcionario como economista del Estado, con ingresos mucho más modestos.
De la Serna prepara su CV
Íñigo de la Serna trabajó durante un breve periodo de tiempo en un estudio de ingeniería. En 1999 entró en política, siendo nombrado cargo de confianza, y no ha vuelto a pisar el sector privado desde entonces, salvo en visitas oficiales. Al exministro le esperan dos años de paro forzoso, en los que cobrará el 80% de su sueldo de ministro, para no entrar en actividades privadas de las que aún tuviera conocimientos privilegiados derivados de su cargo anterior. ¿Le tocará ir a repartir currículums después?
