Las ya de por sí tensas sesiones de la Comisión de Partidos del Senado han llegado a su máxima crispación con las declaraciones de la vicepresidenta valenciana, Mónica Oltra, ofendida y enfadada al creer que había sido llamada “Caperucita”, y del senador Carles Mulet, sin reparos en ser tachado de “payaso”.

La reunión, celebrada en el arranque de las Fallas para desazón de Oltra, ha estado presidida por continuas interrupciones, respuestas airadas y gestos de desaprobación, sin faltar insultos fuera de micrófono y episodios un tanto grotescos donde los asistentes han polemizado sobre si se habían llamado esto o lo otro.

El mayor y más divertido encontronazo se ha producido cuando Mónica Oltra explicaba la “laguna” legal existente sobre la contabilidad de las coaliciones electorales como Compromís y el portavoz del PP, Luis Aznar, le replicaba: “Somos muy mayorcitos ya para creer en los cuentos de Caperucita”.

“Me puede llamar Caperucita, pero ustedes el lobo lo tienen en la Audiencia Nacional”, ha apuntado Oltra muy enfadada. “Yo no le he llamado Caperucita”, ha sostenido, tajante, el senador del grupo popular.

A partir de ese momento se ha desatado una bronca que ha obligado a intervenir a la presidenta de la comisión, Rosa Vindel, del PP.

“Si Caperucita era una persona encantadora...”, ha agregado Aznar, tal vez para intentar suavizar el ambiente, a lo que Vindel le ha emplazado a aclarar “que no había llamado Caperucita” a la compareciente, entre protestas de los senadores del PP.

Para zanjar la polémica, el senador ha pedido que “constara en acta” que “no” había llamado Caperucita a la vicepresidenta, pero ha apostillado con una media sonrisa: “Faltaría más que yo la llamase Caperucita, con lo que me gusta a mí ese cuento”.

El payaso y el ladrón

La sesión había comenzado en un ambiente encendido a cuenta del senador de Compromís y compañero de partido de Oltra, Carles Mulet.

Había planteado una inacabable relación de preguntas retóricas, en tono irónico, para sacar a colación los casos de corrupción en los que el PP estuvo o está implicado, escuchada muy resignadamente por los “populares” hasta que calificó de “farsa” la comisión.

Tras el preceptivo rapapolvo de la presidenta Vindel, este jueves muy atareada en su misión moderadora, ha comenzado el interrogatorio de Luis Aznar a Mónica Oltra, a la que ha considerado una “niña lista desde pequeña”.

La sesión avanzaba, aunque a trompicones, hasta que el senador del PP Francisco Javier Fernández González la ha interrumpido para quejarse a Vindel de que Mulet, sentado a su lado, no paraba de insultar a su compañero Aznar con expresiones como “payaso impresentable, machista o sinvergüenza”.

“Que lo demuestre, me acaba de injuriar, que lo demuestre”, se ha quejado a su vez el propio Mulet.

Ese episodio ha quedado grabado en la memoria del senador de Compromís, quien ha vuelto a intervenir para arropar a la segunda compareciente -la dirigente de su partido Mónica Mollà- de nuevo para poner a caldo una comisión de “revancha” de la “organización criminal” PP mientras lamentaba algunas risas de sus senadores.

“Ya me han dicho antes que era un payaso”, ha apostillado, para reivindicar la figura del payaso, “que es una profesión muy digna”, porque “ser payaso es una buena profesión; ser ladrón no lo es”.

Como se han repetido los comentarios del grupo popular, Mulet ha espetado a uno de ellos: “¿Te has dado por aludido?”, y lamentar que sus compañeros “se den por aludidos cuando uso el término ladrón”.

Al filo de las dos de la tarde, cuando exponía sus conclusiones, Aznar se ha aventurado a deducir que la actitud de la compareciente no era más que “un problema de educación” y ha recordado: “A mí me enseñaron de pequeño que cuando habla una persona, se le escucha”.

El “calamar” del PP

Volviendo a la comparecencia de Oltra, la vicepresidenta del Consell no ha dudado en recriminar al PP que pretenda, como el calamar, “echar tinta para oscurecerlo todo” y hacer ver que en todos los partidos existe corrupción cuando ellos son “el partido corrupto”.

Oltra ha criticado que los populares haya convocado a los representantes de los partidos “honrados” hablar de su financiación cuando “el problema de corrupción lo tiene el PP”.

Por eso, ha considerado que saben que no les va a salir bien esta “jugada” porque “no es lo mismo que te citen a declarar en la Audiencia Nacional por corrupción que el PP, que es el partido de la corrupción, nos llame otros partidos” a comparecer en esta comisión del Senado.

Ha afirmado que la financiación de Compromís “está bien clara”, ya que se financia con las subvenciones públicas y las aportaciones y cuotas de sus afiliados y “hasta el último céntimo en nuestra coalición está claro y publicado en la web”, ya que en su partido practican “la total transparencia y claridad” de sus cuentas.