Puede parecer una broma, pero no lo es; podría formar parte de un guión cinematográfico firmado por el genio manchego José Luis Cuerda e interpretado por el no menos laureado José Sazatornil, fallecido en 2015, pero tampoco se trata de una versión de 'Amanece que no es poco'. No. Se trata de unas declaraciones del que todo apunta será el sustituto de María Dolores de Cospedal en el cartel electoral del PP en Castilla-La Mancha de 2019, toda vez que la ministra de Defensa se niega a volver a presentarse en los comicios autonómicos que la auparon a la presidencia de la región en 2011, perdiéndola cuatro años después por las políticas austericidas aplicadas en la comunidad. Ese sustituto, Vicente Tirado, el nuevo “arrancacepas”, como ya es conocido en tierras castellano-manchegas, ha acusado al presidente socialista, Emiliano García-Page y a la plaga de conejos que asola las tierras de Don Quijote de ser los causantes del éxodo rural y el abandono de los pueblos. Y se ha quedado tan pancho.

“Page da la espalda a los pueblos”

Así, Tirado ha señalado que “la gente abandona el mundo rural porque el Gobierno regional de Page da la espalda a los pueblos de Castilla-La Mancha”. De este modo, ha manifestado que, cuando Page no soluciona la grave plaga de conejos que están sufriendo nuestros pueblos, y que está arruinando a los agricultores, éstos se tienen que marchar del mundo rural. Además, ha añadido, “Page da la espalda a la actividad cinegética”, en relación con la modificación de la ley de caza que se tramita en las Cortes regionales y que pretende abolir la “escopeta nacional” impuesta por Cospedal cuando llegó a la presidencia, con el alanceo a caballo del jabalí o el corte de caminos, entre otra aberraciones.

Cierre de colegios y centros de salud…

Vicente Tirado ha realizado estas manifestaciones en el transcurso de la Convención Provincial del PP bajo el lema “Cuenca, una apuesta por el reto demográfico”, donde ha apostado por “revertir la situación de despoblación que se está dando en los municipios de Castilla-La Mancha” y ha resaltado que “si hay una institución comprometida con buscar soluciones en relación con la despoblación es la Diputación Provincial de Cuenca y su presidente, Benjamín Prieto”, al tiempo que exigía a Page que “no abandone ni dé la espalda a Cuenca, que es una provincia con grandes recursos”, olvidando que fue el PP y su presidenta Cospedal los autores del desmantelamiento de los servicios básicos de las zonas rurales de Catilla-La Mancha en general y de Cuenca en particular, como así se ha encargado de recordárselo el secretario general del PSOE conquense, Luis Carlos Sahuquillo.

Sahuquillo ha recordado que Cospedal “machacó” a la provincia de Cuenca durante su legislatura, cerrando colegios rurales, centros de salud y amortizando las plazas de médicos jubilados, para asegurar que ha sido Page el que “ha repuesto esas plazas, hemos abierto el Centro de Salud Cuenca III, estamos haciendo las obras de un hospital nuevo que necesita la provincia de Cuenca y que Cospedal paralizó”. El también diputado socialista por Cuenca ha lamentado que “Cospedal abandonó a los desempleados, a los que no tenían ni para comer”, mientras que el Gobierno de García-Page “lo primero que hizo fue poner sobre la mesa recursos económicos, coordinado con todas las instituciones, para que los desempleados puedan tener unos ingresos”.

Y ahora pide las 35 horas

Pero lo más alucinante del sustituto de Cospedal es su desparpajo a la hora de acusar a Page de todos los males existentes, catalogándolo de “el gran enemigo del mundo rural”. En este sentido, Tirado ha dicho que Page “ya no tiene excusas y debe implementar la jornada de 35 horas, porque no está puesto en nuestra región por culpa de él, ya que en otras comunidades autónomas se han buscado las fórmulas para aplicarlo”, cuando fue Cospedal siendo presidenta de Castilla-La Mancha la que incrementó la jornada laboral y el Gobierno de Rajoy el que ordenó interponer un recurso de inconstitucionalidad contra la ley de Castilla-La Mancha que establecía en 2016 la jornada laboral de 35 horas semanales de promedio en el sector público de esa Comunidad, incluido el personal sanitario.

Según el Gobierno, esa regulación, aprobada por García-Page hace justamente en marzo dos años, contravenía lo dispuesto en la Ley de Presupuestos Generales para el año 2012, dictada con carácter básico, que establecía que la jornada general de trabajo del personal del sector público no podrá ser inferior a treinta y siete horas y media semanales de trabajo efectivo de promedio en el cómputo anual. Blanco y en botella.