El PP malagueño ha nominado ya los candidatos de las grandes ciudades de la provincia. Son municipios, en su mayoría, que pasaron de ser fortines de la derecha hasta las pasadas elecciones locales a ser gobernados por gobiernos plurales presididos  por socialistas como fueron el caso de Vélez Málaga, Nerja, Benalmádena, Marbella, Rincón de la Victoria (estos dos últimos con mociones de censura recientes a favor del PP) o Torremolinos.

El icono del PP malagueño se derrumba
Torremolinos  fue el emblema, el icono y el santo y seña de la derecha malagueña durante 20 años. Su pérdida fue una grave herida por la que supura aun el PP andaluz Un alcalde déspota y autoritario pero que ganaba elección tras elección, Pedro Fernández Montes, dejaba el poder para dar paso a una mayoría progresista. Fernández Montes dimitió como concejal y se refugió en su bunker de un partido que controla con casi 600 militantes, una de las agrupaciones locales con más número de militantes. Para hacer la travesía del desierto puso al frente a una delfina que hizo la carrera política local a su sombra, Margarita del Cid. La dejó de portavoz municipal y la impulsó hacia la alcaldía. Pero esta fue alejándose de su protector, lo fue marginando y comenzó a no defender la gestión de sus amplios mandatos.

La venganza de "Don Pedro"
La venganza de "Don Pedro" tardó poco en mostrarse y derivó en un grave enfrentamiento que produjo ridículos tales como que a los congresos provinciales no salieran elegidos delegados ninguno de los concejales actuales laminados por la ira del ex alcalde y el todopoderoso control del partido que ejerce. El PP de Torremolinos no quiere y no va a apoyar la candidatura de Margarita del Cid a la alcaldía, ni a ella ni a ninguno de sus actuales concejales.

Un dedazo que abre las navajas internas
Con esa minoría exigua en la que se encuentra Margarita del Cid ha tenido que recurrir a sus amigos desde la adolescencia como los dirigentes provinciales de su partido, Elías Bendodo y a los regionales, el mismísimo presidente autonómico Juan Manuel Moreno Bonilla para ser impuesta a dedazo y encabezar la lista en mayo de 2019. Del Cid ingresó en las Nuevas Generaciones malagueñas junto a Bonilla y Bendodo. Forman un lobbiy malagueño y regional -el clan de los "boquerones"- con compromiso de sangre y han caminado juntos en el partido. Mientras, en Torremolinos, se espera tormenta política de altura porque la ira de Fernández Montes y los casi 600 militantes van a a abrir una crisis de terribles consecuencias internas. Las navajas y alfacas peperas torremolineneses está abiertas y prestarse a usarse si el PP andaluz ratifica, como así será, el nombramiento digital de la candidata. Podría llegarse al extremo de que la legión de militantes populares locales encabezada por Centurión Fernández caminen hacia una lista independiente de la derecha local. Eso haría un daño inmenso en la perspectivas electorales de los conservadores que ya de por sí lo tienen muy complicado.

Andreotti en Torremolinos
Pero los problemas internos para la candidata "in pectore" se amplían. Decía Giulio Andreotti no con cierto cinismo del que hacía gala el astuto líder democristiano italiano que "El poder desgasta, sobre todo cuando no se tiene". Para evitar ese deterioro a Margarita del Cid por "el frío que hace en la oposición" -adaptación andreottiana de Alfonso Guerra-., el aparato provincial y regional decidió ponerla al frente de la poderosa, influyente y rica en presuesto Mancomunidad de Municipios de la Costa del Sol desde el inicio de este mandato municipal. La colocaron de presidenta del ente comarcal que une a municipios importantes como Marbella, Fuengirola, Benalmádena, Estepona y Torremolinos enre otros, para impulsarla, promocionarla y abrigarla del "frío" de estar en la oposición. Y esa plataforma puede ser ahora su féretro político.


Denuncias internas
Un escándalo le ha estallado a la aspirante a la alcaldía en estas cruciales fechas. Unas informaciones enviadas a Génova 13 han abierto la polémica y han añadido una piedra más en el camino de la candidata. Un dossier enviado por miembros del PP malagueño a Dolores de Cospedal en su calidad de secretaria general del partido, le informa de que ella, Del Cid, como presidenta de la Mancomunidad, utilizó presupuesto público para abonar cenas de lujo en días no laborables, un máster en liderazgo político para ella e incluso apunta las informaciones de que se abonaron estudios demoscópicos presumiblemente para mejorar la imagen del presidente del PP andaluz, su amigo, Juan Manuel Moreno Bonilla

Como informamos desde EL PLURAL confirman estos hechos esa amplia documentación remitida a Madrid y que van desde talones firmados por Del Cid, cheques a su nombre, facturas o incluso correos electrónicos desde su cuenta oficial. Destaca el hecho, que ya se barruntaba en los cenáculos políticos malagueños, de que se trata de una denuncia interna remitida a la sede nacional del PP. Según este dossier Del Cid utilizó dinero de la partida del Grupo Popular en la Mancomunidad. Esta partida obliga legalmente a utilizarla para gastos de funcionamiento del grupo pero jamás para comidas, ágapes, máster o cursos y estudios demoscópicos. De comprobarse los delitos serían muy graves.

"Vega Sicilia" y jamones de pata negra
De  2011 a 2015 Del Cid ordenó el pago de un curso de liderazgo de la Universidad de Deusto por casi 2.000 euros, encuestas y estudios demoscópicos por valor de 29.000 euros. Se han denunciado asimismo facturas de cenas en restaurantes de lujo de la Costa del Sol -Del Cid reside en Torremolinos- con consumo de  botellas de vino (Macán de las Bodegas Vega-Sicilia) de 45 euros y platos de jamón ibérico de 240 euros el kilo. Las cenas además de opíparas y en grandes restaurantes como Casa Flores en Torremolinos, también resultaron caras para el presupuesto público -o sea para los ciudadanos que la pagan con sus impuestos-. Hay facturas de hasta 449 euros. Curiosamente esa factura aparece modificada a bolígrafo escribiendo 465 euros. Presumiblemente se cargó hasta la propina. También firmó cheques en blanco. Margarita del Cid cobra como presidenta más de 65.000 euros al mes y tiene asignación como portavoz del PP en el Ayuntamiento de Torremolinos.

Decíamos que venían tiempo de tormentas para el PP local por la división interna. Pues ya han llegado las primeras aguas. En Torremolinos y en Málaga se escucha que son los primeros escarceos y que lo peor está por venir. Ha temor a próximas denuncias y revelaciones que podrían llegar desde el mismo partido local pero también en sentido inverso y desde el ámbito de la candidata. A dossierazo limpio, la guerra acaba de comenzar. "Al suelo que vienen los nuestros disparando". La venganza es un plato que se sirve frío