“Yo soy afiliado por Almería. Muchas gracias”. Es la vergonzante respuesta que hace dos días dio el portavoz oficial del Partido Popular en el Congreso de los Diputados, Rafael Hernando. Siempre tan lenguaraz, Hernando se quedó sin palabras el día en que sobre su partido llovían las declaraciones de Francisco Granados y Luis Bárcenas confirmando la financiación irregular del PP en Valencia y Madrid.

 

Ciertamente, Rafael Hernando es diputado por Almería. Se le considera un paracaidista, porque es natural de Guadalajara y, de hecho, sus primeras polémicas como diputado las protagonizó a raíz del fatídico incendio en la provincia. Tras un debate en la Cámara sobre el tema, tuvo que ser sujetado para no agredir a Alfredo Pérez Rubalcaba.

Hernando fue concejal de Guadalajara y presidente de las Nuevas Generaciones del PP, pero lleva desde el año 1993 siendo diputado en el Congreso, siempre por Almería, donde su arraigo hay que buscarlo en un apartamento de 70 metros cuadrados que tiene alquilado en la ciudad andaluza. Su declaración de bienes también enseña que Hernando forma parte del selecto grupo de diputados que cada mes cobra 1.800 euros de dietas para alojamiento, libres de impuestos, por haber sido elegido por Almería y tener que trabajar en Madrid, a pesar de tener una casa de 128 metros cuadrados en la capital.

Pero, en cualquier caso, aceptemos pulpo como animal de compañía y finjamos por un momento que Hernando es un señor de Almería que no tiene cargos orgánicos en el PP, que no ha dirigido a sus juventudes, y que sólo viene a Madrid de lunes a jueves, sin enterarse de más que de la salida que tiene que coger en la autopista de Andalucía.

En ese caso, a lo mejor podría explicar la madeja de presuntos casos de corrupción que asedian al Partido Popular en la provincia, y que en su mayoría pasan por la figura del presidente de la formación local, Gabriel Amat, presidente de la Diputación de Almería y alcalde de Roquetas de Mar desde hace más de dos décadas. Además, Amat cuenta con una de las losas que precede a todas las caídas: el elogio de Mariano Rajoy, quien en 2013 dijo de él que "ha hecho una gestión institucional fantástica". Los precedentes de Carlos Fabra, Alfonso Rus, Francisco Camps, Jaume Matas o Rodrigo Rato deberían hacer a Amat temerse lo peor.

Y sí, también hay sospechas de financiación irregular. Es lo que se conoce como caso Hispano Almería, que lleva el nombre de la empresa constructora acusada de mantener durante una década una caja B para pagar mordidas del 4% a técnicos del Ayuntamiento y del 10% a los políticos a cambio de las adjudicaciones de concursos públicos. El caso lo investiga desde hace años el Juzgado de Instrucción número 3 de Almería, que está indagando en la sospechosa fortuna que han amasado algunos de los funcionarios de Roquetas de Mar.

En todo el territorio nacional, no hay ningún político con tantas sospechas sobre él como las que recaen sobre el presidente del PP de Almería, en el que Hernando es un humilde afiliado. Nada más ser relegido con el 90% de los votos en el último Congreso provincial, otra juez abría 25 diligencias para investigar 25 sociedades que podrían estar vinculadas a Amat. En total, según El Confidencial, Amat y su clan acumulan “hasta 108 sociedades familiares y relacionadas entre sí con más de 315 órganos sociales distintos”.

Amat también fue imputado por conceder una licencia para construir chalets de lujo, entregó 48.000 euros de dinero público a la televisión OndaMar, donde él y su familia tienen participaciones y su nombre apareció en las escuchas de la trama Púnica.

Cómo sigue al frente del PP de Almería es una incógnita que Antonio Avendaño explicaba así en su artículo Gabriel Amat es más rápido que la justicia.

Amat acumula, ciertamente, muchos y muy jugosos titulares pero ningún procesamiento: 'La fiscalía denuncia al líder del PP en Almería por fraude. Un tribunal insta a seguir investigando a Amat. El líder del PP de Almería vendió seis coches a su propio Consistorio. Un juez indaga los vínculos del líder del PP de Almería con 27 empresas. Un ‘pelotazo’ de 4 millones para el hombre fuerte del PP en Almería. La policía investiga un entramado de 103 sociedades vinculadas al presidente del PP almeriense. El líder del PP de Almería dio contratos por más de un millón de euros a su yerno. Las escuchas de la 'Púnica' salpican a Gabriel Amat. Las cuentas b de Hispano Almería reflejan regalos a Amat por 11.085 euros… El líder popular ha dejado tras de sí todos esos titulares, sí, pero también otros como este: 'Archivada la causa contra Amat por el caso Fabriquilla'.

A lo mejor, la respuesta de por qué Amat no dimite ni nadie le pide responsabilidades la tiene Rafael Hernando, ese humilde afiliado del PP de Almería.