El pasado 11 de enero, coincidiendo con el parón navideño y tras el descalabro de las elecciones del 21D, medios de comunicación, ciudadanos y políticos nos preguntábamos dónde estaba Pablo Iglesias. Durante más de 20 días no se sabía nada de él, había desaparecido. Su último acto público había sido el 19 de diciembre, cuando arropó al candidato de En Comú Podem en el cierre de campaña. Era 11 de enero y no había noticias del secretario general de Podemos. No reunió a su Ejecutiva tras los comicios catalanes y delegó en Rafa Mayoral el balance anual del curso. Los rostros morados le excusaban: “No ha dejado de aparecer en ningún momento". Iglesias estaba trabajando en un informe para trazar las líneas maestras de la estrategia morada para 2018. Y tras presentarla al Consejo Ciudadanos Estatal, el líder de Podemos ha redoblado su presencia en medios: suma cinco entrevistas en medios nacionales en 15 días.

Su reaparición se materializó el pasado martes 16 de enero en los Informativos de Telecinco junto a Pedro Piqueras, apenas tres días después, otra entrevista, en esta ocasión a la Cadena SER. En los días siguientes pasó por eldiario.es, el Huffpost y la Sexta este pasado domingo.

Viene para quedarse

Los resultados del 21D no fueron buenos ni muchos menos, así lo asumió el propio Domènech. El debate territorial había desgastado a Podemos y dado alas a Ciudadanos, e Iglesias protagonizó un retiro espiritual para reconducir la situación El secretario general diseñó entonces una nueva hoja de ruta lejos de la cuestión soberanista, recuperando la agenda social y otorgándole la centralidad del discurso. Un Podemos que, coincidiendo con su cuarto aniversario, recuperaba su esencia más pura. Un eterno retorno. Un volver a los orígenes.

Las reflexiones ya están hechas y el rumbo fijado. Podemos ha puesto la velocidad crucero en dirección a las elecciones autonómicas y municipales de 2019, y su secretario general, ya está en modo campaña (¿algún político deja de estarlo en algún momento?).