Juan Miguel Villar Mir, dueño de la constructora OHL, ha acudido este viernes por la mañana a la Comandancia de la Guardia Civil de Tres Cantos (Madrid) para que los agentes le tomen las huellas con motivo de la investigación contra él que hay en el caso Lezo.

El objetivo es contrastar la autenticidad de un documento incautado dentro de uno de los registros vinculados a este caso de corrupción, en una pieza secreta, según informa El Diario.

Villar Mir está investigado en la Operación Lezo con relación a la supuesta mordida de 1,4 millones de euros para conseguir la adjudicación del tren de Cercanías entre Móstoles y Navalcarnero. Esta comisión se la habría quedado por el camino el empresario Adrián de la Joya, tal y como confesó él mismo, aunque se habría utilizado para acusar desde el Partido Popular a Ignacio González de tener una cuenta en Suiza, tal y como revelan las grabaciones realizadas al expresidente de la Comunidad de Madrid y ofrecidas por El Plural.

El expresidente madrileño contó a sus contactos, en las grabaciones que le realizó a la Guardia Civil, que dicho ingreso nunca fue para él, pero que los datos de la transferencia fueron utilizados por Villar Mir, en connivencia con Mariano Rajoy y el entonces tesorero del Partido Popular, Álvaro Lapuerta, para acusar a Ignacio González de tener una cuenta en Suiza. Algo que, según afirmaba, se habría hecho con un "montaje" audiovisual en la grabación del espionaje que se realizó en Colombia, en una visita relacionada con las operaciones del Canal de Isabel II.

La fijación de Ignacio González con el asunto le llevó a contactar con Luis Vicente Moro, un personaje turbio que fue delegado del Gobierno con Aznar y con quien el expresidente madrileño hablaba de montar "puticlubs". Su intención era que sus contactos pudieran investigar quién estaba detrás de la comisión para "cogerle por las pelotas al hijo puta de Villar Mir y decirle mira, aquí tengo el circuito y lo que hiciste hijo puta, tú has pagado esto, esto, esto... y además tal... y ya no te quiero contar si sabemos quiénes son los destinatarios de la pasta”.