El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, mantendrá este lunes sendas reuniones en el Palacio de la Moncloa con el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, y con el líder de Ciudadanos, Albert Rivera, para analizar la jornada del 1 de octubre y el horizonte que se abre a partir de ahora. Rajoy recibirá a Sánchez a las 16:30 horas y a Rivera a las 18:00 horas, después de las conversaciones telefónicas que ya mantuvo ayer con ambos para intercambiar impresiones sobre el desarrollo de los acontecimientos en Cataluña.

Ignora a Podemos, por el momento...

A quien todavía no ha llamado Rajoy es a Podemos, el tercer partido más votado, por detrás de PP y PSOE. Hasta el momento, el jefe del Ejecutivo ha evitado contacto alguno con Pablo Iglesias para hablar de la situación en Cataluña, ni este domingo ni en los últimos tiempos. Iglesias fue muy crítico anoche él, recordándole que el Estado de Derecho "no se defiende a palos ni desde las cloacas". La formación defiende el derecho a decidir en Cataluña, eso sí, un referéndum pactado.

Rajoy, en su mensaje institucional de anoche, anunció una ronda de contactos con todos los partidos con representación parlamentaria para reflexionar sobre el futuro de España. Hasta el momento no ha dado ningún paso hacia el tercer partido más votado, ni este lunes ni en los últimos días. 

Negó rotundamente el referéndum y se refirió al mismo como una “mera escenificación” contra “la convivencia democrática y la legalidad”. El jefe del Ejecutivo, lejos de hacer cualquier tipo de autocrítica defendió que se había constatado la fortaleza del Estado, que actúa con todos los recursos legales ante las provocaciones.

Por otro lado, también prefirió ver el vaso medio lleno, hablando de que “la mayoría de los catalanes han demostrado que son gente de ley”, por que la han cumplido “ignorando esta convocatoria y situándose al lado de la democracia".

Pedro Sánchez reivindica unidad, a pesar de Rajoy

Mientras tanto Pedro Sánchez confirmó que los socialistas "estarán a la altura" ante la "grave crisis que amenaza la integridad territorial". Todo ello, "a pesar de este Gobierno". El líder socialista reivindicó la "unidad" frente a las siglas o cálculos electoralistas.

Rivera, el cuarto en discordia y socio preferente de Rajoy, culpó a Puigdemont y Junqueras de la situación y reclamó un adelanto electoral en Cataluña.