“El referéndum no se va a celebrar”, “vuelvan a la legalidad” porque aún están a tiempo “de evitar daños mayores”. Este ha sido el mensaje central de la declaración institucional con la que Mariano Rajoy ha cerrado este miércoles, tras una jornada de detenciones, protestas y registros.

El presidente del Gobierno ha querido lanzar un mensaje de tranquilidad para los ciudadanos y de advertencia para la Generalitat y los independentistas.

De calma porque ha recordado que España es un Estado de derecho con mecanismos para hacer que se cumpla la ley. “Velaremos porque nadie sufra las consecuencias de estos acontecimientos” porque los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado, La Fiscalía y los jueces están “defendiendo los derechos de todos los españoles frente a los que quieren liquidarlos”, ha dicho duramente Rajoy.

Según ha explicado existen “muchos regímenes no democráticos” que “han utilizado el voto para intentar legitimarse” pero en España, “lo que está en cuestión es el propio fundamento de la democracia” y por eso pondrán en marcha “los mecanismos necesarios para impedir que quienes pretenden violar las normas básicas de nuestra democracia, puedan hacerlo”.

Pero también de advertencia porque no ha dudado en asegurar que se tomarán medidas contundentes y proporcionales si se continúa con un referéndum que es “ilegal desde su origen”

"Cesen en sus actuaciones" porque "saben que este referéndum ya no se puede celebrar" porque "nunca fue legal y legítimo".

Votar en el 1-O no es democracia

Ante las voces que aseguran que la participación en el referéndum se hace en defensa de la democracia en Cataluña, Rajoy ha recordado que “votar solo es sinónimo de democracia cuando se hace de acuerdo a la ley". Por ello, ha vuelto a repetir que "cada vulneración de la ley tendrá su respuesta” porque "la desobediencia a la ley por parte de un poder público es todo lo contrario a la democracia”.

Por eso ha pedido a los independentistas que olviden el procés y se centren en respetar las leyes para permitir la convivencia. “Vuelvan a la ley”, “dejen que los catalanes puedan hacer su vida en paz”"Renuncien de una vez a esta escalada de inestabilidad y desobediencia. Están a tiempo de evitar males mayores" si se vuelve al diálogo dentro de las leyes y se deja de impulsar a la gente a que salga a las calles.

“Evitar que la sinrazón”

Tras la detención de 14 altos cargos de la Generalitat dentro de la Operación Anubis y la incautación de casi 10 millones de papeletas para el 1-O, El Gobierno seguirá trabajando para "evitar que la sinrazón de unos pocos la sufran el conjunto de los ciudadanos".

Y no ha sido la única advertencia. A quienes "aprovechan el órdago independentista" para "generar inestabilidad en las calles" y "debilitar las instituciones" les anuncia que “tendrán que responder ante los españoles de su deslealtad en un momento tan decisivo de la vida política", ha añadido.