Edmundo Rodríguez no sólo acusó a Ignacio González de cobrar comisiones por inflar la compra de la sociedad brasileña Emissao. También le ha puesto cifras: el expresidente de la Comunidad de Madrid se habría embolsado 900.000 euros del total, que asciende a 2,7 millones de euros.

El ex responsable de la filial del Canal de Isabel II en Latinoamérica ha dado al juez documentos que prueban el supuesto soborno de 2,7 millones que se habrían repartido entre él, González y una tercera persona que podría ser el testaferro del expresidente, según El Mundo.

El dinero de González se habría en una cuenta independiente a su disposición que nunca se tocó. Y los 1,8 millones restantes fueron a parar a otro depósito. Rodríguez Sobrino dice que él controlaba ambas cuentas y se hace responsable del cobro de la comisión. El alto cargo habría decidido colaborar con la justicia el pasado mes de julio.

Según fuentes próximas a Ignacio González, que sigue en prisión y a quien el juez niega la libertad por el chivatazo de Rodríguez Sobrino, el expresidente niega tener cuentas en Suiza y haber cobrado ninguna comisión. Asegura que todo el relato de su hombre de confianza es una invención para salvar a su hija, que hoy declara en la Audiencia Nacional.