El jefe del Ejecutivo, Mariano Rajoy, ha mostrado su chulería en la comparecencia en la Audiencia Nacional ante las acusaciones de los letrados, que han buscado llevarlo a la esquina del ring.

El primer punch del presidente, durante su declaración en el juicio de Gürtel, se lo ha dado a Manuel Benítez de Lugoabogado de la acusación popular Asociación de Abogados Demócratas por Europa (Adade), para reiterar que él no se encargaba de los asuntos económicos del partido, hasta el punto de que ha dicho al letrado: "No sé si se ha confundido de testigo"La respuesta que ha dado el presidente durante su comparecencia ha molestado a Manuel Benítez de Lugo, quién la ha calificado de “impertinente”.  El presidente del tribunal, Ángel Hurtado, ha apercibido al testigo.

El segundo revés de Mariano ha sido como respuesta a la queja de Benítez de Lugo de una respuesta "muy gallega" cuando Rajoy le ha explicado que un viaje a Canarias lo pagó el PP "hasta donde yo sé". El presidente, recordando sus raíces, le ha respondido que "la respuesta debe ser muy gallega, porque no puede ser riojana".

El ataque esperado con los SMS que envió a Bárcenas provocó que Rajoy sacara toda su artillería.“Tengo la costumbre de responder a los mensajes que me manda la gente”, ha respondido para posteriormente lanzar su tercer punch poniendo en tela de juicio que el letrado entendiera lo que significa “hacemos lo que podemos”. A lo que el abogado del PSM ha respondido que hasta ahí llega. “Algo opinable”, según Rajoy.