Después de polémicas en manifestaciones y actos por toda España, el Gobierno ha confirmado que exhibir la bandera republicana no es constitutivo de ningún delito. Así se lo ha respondido a una pregunta que hicieron los senadores de Compromís Carles Mulet y Jordi Navarrete después de la polémica generada el pasado 14 de abril cuando varios ayuntamientos de Valencia colgaron la bandera tricolor.

En la respuesta a la que ha tenido acceso ELPLURAL.COM, el Gobierno explica que en España España “no resulta punible la mera exhibición de banderas si éstas no van acompañadas de una conducta activa propia de un crimen de odio o discurso que ensalce la violencia o el odio, ya que en tal caso podríamos estar ante un delito tipificado en el artículo 510 del Código Penal”.

Este artículo pena la incitación al odio, la discriminación, la negación de genocidios y la justificación y enaltecimiento del terrorismo, como con el caso de las pancartas de apoyo a ETA, a sus miembros y sus presos.

El Gobierno contesta a Compromís que “con carácter general, el hecho de exhibir cualquier bandera en principio no es ilegal ni inconstitucional” y, sin que lo pidiese la pregunta de los senadores, aclara que la Ley de Seguridad Ciudadana aprobada en 2015, la Ley Mordaza, “no sanciona el mero hecho de exhibir banderas” republicanas.

Desde el Ejecutivo también señalan que la muestra de cualquier bandera estaría amparada “en la libertad ideológica y la libertad de expresión” y hacen referencia a la Ley de Banderas.

Contradiciendo a sus delegaciones

Con esta respuesta, el Gobierno de Mariano Rajoy contradice las decisiones de algunas de sus delegaciones en las comunidades autónomas que denunciaron el uso de la bandera republicana en distintos ayuntamientos, algo que también podría aplicarse al caso de la ikurriña exhibida en el Ayuntamiento de Pamplona durante el inicio de las fiestas de San Fermín.