Cuando Zapatero dejó la conferencia, Aznar se mostró más cómodo. El quedarse solo con su enemigo político de los años 90 permitió ver a un Jose María Aznar en un terreno más manejable. Al igual que Zapatero, Aznar se ha mantenido en su tono más habitual. Autoritario, contundente y ególatra. "Puedo decir que dejé un país mejor del que me encontré". También se ha podido ver la versión más "chistosa" del líder popular. Más de una vez ha desatado las risas de los trajeados asistentes. El monologuista Aznar afirmó estar "al 95% de acuerdo con las palabras de Felipe González". Sin embargo, su intervención más sonada ha sido con la marcha de Zapatero. Con cierta vanagloria y bastante desacierto le dijo: "¿Te vas a Venezuela? Pues ten cuidado". El comentario jocoso de Aznar, más propio del gracioso de la clase, ha condenado a Zapatero a salir del auditorio entre la carcajada del público.

Cataluña

Aznar sorprendió con su fino humor pero no con su opinión sobre Cataluña: "Cuando alguien pega una patada en la mesa, no se puede reaccionar como si no hubiera dado la patada". En cuanto una posible separación ha sido muy claro: "Antes de romperse España se romperá Cataluña". Por otra parte ha querido parafrasear a González en el uso del jarrón chino como metáfora de los expresidentes: "Seamos un jarrón de Hong Kong o de Shanghái tenemos que buscar puntos de encuentro. España no está para que haya más personas que jueguen irresponsablemente a la división sino para que haya más personas que jueguen para buscar puntos de encuentro por el país".

También quiso referirse al artículo 155 de la Constitución, el cual permite al Estado obligar a las comunidades a cumplir la ley: "No se puede aceptar que las leyes sean vulneradas sin consecuencia". Además ha ponderado el valor de la Carta Magna y la Transición: "La Constitución española no es un problema sino un gran activo. España es mucho mejor ahora que en 1977, es muy importante darse cuenta que la Transicición y el pacto que se hicieron no fue para esta generación sino para las venideras".

Por otra parte, el magnánimo Aznar ha querido usar unas palabras de Winston Churchill que pueden servir de idea para solventar el problema catalán: "A Churchill le preguntaron cómo ganó la guerra y contestó que hablando con los alemanes". No sabemos si se estaba comparando con el expresidente británico o a Cataluña con la Alemania nazi; lo que está claro es que Aznar sabe quién es el culpable en este conflicto: "No hay un problema entre españoles y catalanes. Hay un problema que han creado una parte de los catalanes".