Desde que el Partido Popular se valiera de su mayoría absoluta en el Congreso de los Diputados para aprobar la denominada Ley Mordaza, el Gobierno de Mariano Rajoy ha recaudado más de 13,5 millones de euros entre julio de 2015 y finales del curso pasado (2016). Un cuerpo normativo que, además de amparar abusos y ayudar a disuadir protestas, ha resultado ser también una ley recaudatoria. Dos de los artículos más polémicos, el 37.4, que castiga las faltas de respeto a los Policías, y el 36.6, relacionado con la desobediencia -que aumentó de grado de leve a grave-, han sido los dos motivos por los que más se ha multado: por el primero se han recaudado 3,47 millones por 22.627 multas, mientras que por el 36.6 se han recaudado hasta 10,15 millones por 16.405 expedientes abiertos.

Este es el caso de Raúl Solís, reportero freelance sevillano que cuenta su historia al diario El País. Solís relata cómo el pasado 29 de marzo le costó dinero trabajar. Estaba cubriendo la manifestación convocada en Sevilla por la presencia del autobús de la asociación ultra Hazte Oír. El reportero no solo no consiguió vender ningún material, sino que, además, fue multado con 150 euros por “faltar al respeto” a un agente de Policía.

Según Solís, "estaba grabando con la cámara y vi que se llevaban a un chico a empujones hasta el furgón. Como tardaban, me interesé por él y pregunté a los agentes. Entonces, me respondieron que qué me importaba y se pusieron hechos una furia", señala a El País. Y como este periodista, otros muchos ciudadanos que han sido sancionado por, por ejemplo, preguntar a un Policía por la identificación masiva de extranjeros.

Una polémica ley que tiene las horas contadas

La Ley Mordaza fue a probada por el PP haciendo alarde de su mayoría absoluta y en contra de toda la Oposición. Una ley que fue redactada en plena crisis económica cuando se sucedían las protestas y cuyo fin era contener las mismas, a pesar de que, según datos de Interior, no se había registrado ningún incidente en el 99% de las manifestaciones convocadas en 2013.

Sin embargo, con la pérdida de la mayoría absoluta del PP, la Ley Mordaza tiene los días contados, o al menos sus puntos más polémicos, puesto que la oposición ya se ha puesto manos a la obra para derogarla.